miércoles, 19 de diciembre de 2018

Estudio: Deut. 34:1-12 La Muerte De Moisés.


El Libro de Deut: ¡Un libro del pacto!
·         El libro sigue la forma de “un pacto” entre un “rey supremo [en este caso el SEÑOR]” y “sus reyes menores y sus pueblos súbditos [en este caso el pueblo de Dios]”.

·         Elementos del pacto en Deut.:  
1.      Preámbulo: Que identifica el mediador del pacto (Deut. 1:1-5);
2.      Prólogo histórico: Que revisa la historia del pacto (Deut. 1:6-4:40);

Estudio: Deut. 34:1-12 La Muerte De Moisés.

·         Disposición del pacto: Después de la muerte del mediador inaugural (Deut. 31-34).
·         ¡Comenzamos con la Disposición del Pacto, que muestra que el SEÑOR quiere que su pueblo sigue viviendo bajo su pacto (ley), no importa quién es el líder!  

Nota:  Moisés (el autor) está todavía el oeste del Jordán (él es prohibido a cruzar al otro lado por Dios), dando instrucciones a los israelitas que están para conquistar el otro lado del Jordán.

Estudio: Deut: 34:1-12 – La Muerte de Moisés.

Dios permite a Moisés ver la tierra prometida
Deut. 32.48 Aquel mismo día Jehová habló a Moisés y le dijo: RVR95
Deut. 32.48 Aquel mismo día el Señor se dirigió a Moisés y le dijo: DHH

Deut. 32.49 (RVR95) “Sube a estos montes de Abarim, al monte Nebo, situado en la tierra de Moab que está frente a Jericó, y mira la tierra de Canaán, que yo doy por heredad a los hijos de Israel.
Deut. 32.49 (DHH) “Ve a las montañas de Abarim y sube al monte Nebo, que está en territorio moabita, frente a Jericó, y mira desde allí la tierra de Canaán, la cual voy a dar en propiedad a los israelitas.

Nota: Moisés que está prohibido por Dios a entra la tierra prometida, esta mandada por el Señor a subir el monte frente de Jericó y mirar la tierra de Canaán. 😊

Nota: Esta es el mismo monte donde Aaron está enterado. Núm. 20.24, Núm. 27.12–13
Núm. 20.24 (TLA) «Aarón ya está por morirse, y no va a entrar en el país que les di a los israelitas, ya que en Meribá ustedes no confiaron en mí, sino que me desobedecieron.
Núm. 27.12–13 (TLA)  Dios le dijo a Moisés: —Ni tú ni tu hermano Aarón reconocieron mi grandeza. Ustedes dos me desobedecieron en el desierto de Sin, cuando el pueblo se peleó conmigo y me exigió agua en Meribá. Pero sube al monte Abarim para que veas el territorio que les voy a dar a los israelitas. Sin embargo, morirás sin disfrutar de él, como sucedió con tu hermano Aarón.

Nota: Es el mismo monte donde el hijo de Aaron, Eleazar, era comisionado. Núm.20.28
Núm. 20.28 (TLA) Y cuando Aarón murió, Moisés le quitó su ropa de sacerdote y se la puso a su hijo Eleazar. Después de eso, Moisés y Eleazar bajaron del monte.

Deut. 32.50 (RVR95) Muere allí en el monte al cual subes, y te reunirás a tu pueblo, así como murió Aarón, tu hermano, en el monte Hor, y se reunió a su pueblo.
Deut. 32.50 (DHH) Allí, en ese monte al que vas a subir, morirás e irás a reunirte con los tuyos, tal como tu hermano Aarón, que murió en el monte Hor y fue a reunirse con los suyos.

Nota: Moisés esta informado por el Señor antes que el también muera en el monte.

Deut. 32.51 (RVR95) Por cuanto pecasteis contra mí en medio de los hijos de Israel, en las aguas de Meriba, en Cades, en el desierto de Zin; porque no me santificasteis en medio de los hijos de Israel.
Deut. 32.51 (DHH) Ustedes dos me fueron infieles delante de los israelitas, cuando estaban en las aguas de Meribá-cadés, en el desierto de Sin, pues no me honraron delante de ellos.

Nota: Aaron y Moisés pecaron contra el Señor cuando golpeó la roca en lugar de hablar a la roca.
Núm. 20.11–13 (TLA) Mientras decía esto, Moisés golpeó dos veces la roca con la vara, ¡y empezó a salir tanta agua que toda la gente y su ganado bebieron! 12 Pero Dios les dijo a Moisés y a Aarón: «Ustedes no creyeron en mí, ni me honraron delante de los israelitas. Por eso, no entrarán con ellos al territorio que les voy a dar». 13 Esto sucedió en Meribá, que significa «queja». Y es que allí los israelitas se quejaron contra Dios, y él les mostró que es un Dios santo.

Deut. 32.52 (RVR95) Verás, por tanto, delante de ti la tierra, pero no entrarás allá, en la tierra que doy a los hijos de Israel».
Deut. 32.52 (DHH) Por lo tanto, vas a contemplar desde lejos la tierra que voy a dar a los israelitas, pero no entrarás en ella.”

Nota: Moisés no entrará la tierra prometida, pero si puede verla desde la montaña.

Nota: Moisés siguió pidiendo permiso del Señor a entra la tierra prometidas hasta el momento que Dios ya ha dicho: ¡Basta!. Deut. 3.27
Deut. 3.27 (TLA) “Pero por culpa de ustedes Dios se enojó conmigo, y no me dejó cruzar el río. Al contrario, me prohibió seguir insistiendo. Sólo me permitió subir a lo alto del monte Pisgá, para ver desde allí todo ese territorio.

Muerte y sepultura de Moisés
Deut. 34.1 (RVR95) Subió Moisés de los campos de Moab al monte Nebo, a la cumbre del Pisga, que está enfrente de Jericó,
Deut. 34.1 (DHH) Moisés subió del desierto de Moab al monte Nebo, a la cumbre del monte Pisgá, que está frente a Jericó.

Nota: Mas información – La monte Nebo, que es parte de la cumbre de Pisga.

Nota: Este monte es frente la cuidad de Jericó (la ciudad de las palmas). Núm. 27.12
Núm. 27.12 (TLA) Dios le dijo a Moisés: —Ni tú ni tu hermano Aarón reconocieron mi grandeza. Ustedes dos me desobedecieron en el desierto de Sin, cuando el pueblo se peleó conmigo y me exigió agua en Meribá. Pero sube al monte Abarim para que veas el territorio que les voy a dar a los israelitas. Sin embargo, morirás sin disfrutar de él, como sucedió con tu hermano Aarón.

Pisga: El monte en que Balaam trate (sin excitó) a maldecir Israel. Num. 23:13-14
Núm. 23.13–14 (NTV)  Entonces el rey Balac le dijo: —Ven conmigo a otro lugar. Allí verás otra parte de la nación de Israel, aunque no a todos. ¡Maldice por lo menos a esa parte! 14 Así que Balac llevó a Balaam a la meseta de Zofim en la cima del monte Pisga. Allí construyó siete altares y ofreció un becerro y un carnero en cada altar.

Nota: Es el monte donde Moisés previamente ha visto la tierra prometida. Deut. 3.27
Deut. 3.27 (NTV) Pero sube a la cima del monte Pisga y mira la tierra en todas las direcciones. Mírala bien, pero no cruzarás el río Jordán.

Nota: Monte Nebo – Es generalmente identificado como el moderno Jebel Neba, una montaña a doce millas al este del punto de entrada del río Jordán en el Mar Muerto. Elevándose a más de cuatro mil pies sobre el Mar Muerto, el Monte Nebo le proporcionó a Moisés un punto de vista desde el cual ver la Tierra Prometida. Sproul, R. C.  (2005). La Biblia de estudio de la reforma

Deut. 34.1b-3 (RVR95) Y le mostró Jehová toda la tierra de Galaad hasta Dan, todo Neftalí, la tierra de Efraín y de Manasés, toda la tierra de Judá hasta el mar occidental, el Neguev, el valle y la llanura de Jericó, ciudad de las palmeras, hasta Zoar.
Deut. 34.1b-3 (DHH) Desde allí el Señor le hizo contemplar toda la región de Galaad hasta el territorio de Dan, las regiones de Neftalí, Efraín y Manasés, todo el territorio de Judá hasta el mar Mediterráneo, el Négueb, el valle del Jordán y la llanura de Jericó, ciudad de las palmeras, hasta Sóar.

Nota: ¡Dios mostró Moisés toda la tierra prometida (norte al sur)!
Deut. 11.24 (NTV) Todo lugar que pises con la planta de tus pies será tuyo. Tus fronteras se extenderán desde el desierto, en el sur, hasta el Líbano, en el norte, y desde el río Éufrates, al oriente, hasta el mar Mediterráneo, en el occidente.

Deut. 34.4 (RVR95) Y le dijo Jehová: «Esta es la tierra que prometí a Abraham, a Isaac y a Jacob, diciendo: “A tu descendencia la daré”. Te he permitido verla con tus ojos, pero no pasarás allá».
Deut. 34.4 (DHH) Y el Señor le dijo: “Este es el país que yo juré a Abraham, Isaac y Jacob que daría a sus descendientes. He querido que lo veas con tus propios ojos, aunque no vas a entrar en él.”

Nota: La tierra prometida era prometida a Abram, Isaac, y Jacob.
·         Abraham, Gen. 15:18.
·         Isaac, Gen. 26:3.
·         Jacob, Gen. 28:13.

Deut. 32.52 (NTV) Así que verás la tierra desde lejos, pero no podrás entrar en la tierra que le doy al pueblo de Israel».

Nota: Moisés siguiera pidiendo premiso a entra la tierra prometida hasta que Dios a dicho Basta.
Deut. 3.25-27 (NTV) Te pido por favor que me permitas cruzar el Jordán para ver esa tierra maravillosa que hay del otro lado, la bella zona montañosa y los montes del Líbano”.26 “Pero el SEÑOR estaba enojado conmigo por culpa de ustedes y no quiso escucharme. “¡Ya basta! —exclamó—. Ni una sola palabra más sobre ese asunto. 27 Pero sube a la cima del monte Pisga y mira la tierra en todas las direcciones. Mírala bien, pero no cruzarás el río Jordán.

Deut. 34.5 (RVR95) Allí murió Moisés, siervo de Jehová, en la tierra de Moab, conforme al dicho de Jehová.
Deut. 34.5 (DHH) Y así Moisés, el siervo de Dios, murió en la tierra de Moab, tal como el Señor lo había dicho,

Nota: Moisés muero en la montaña, pero esta enterado por Dios en el valle de Moab.

Deut. 34.6 (RVR95) Y lo enterró en el valle, en la tierra de Moab, enfrente de Bet-peor, y ninguno conoce el lugar de su sepultura hasta hoy.
Deut. 34.6 (DHH) y fue enterrado en un valle de la región de Moab, frente a Bet-peor, en un lugar que hasta la fecha nadie conoce.

Nota: Enterado por Dios en el valle. Pero nadie conoce el lugar donde quedo enterado.

Nota: Josefo reporto que Eleazar y Josué enteraron el cuerpo en un lugar desconocido.  Otras opinen que Dios asimismo entero Moisés con la ayudad de Miguel el ángel. Judas 9
Judas 9 (NTV) Pero ni siquiera Miguel, uno de los ángeles más poderosos, se atrevió a acusar al diablo de blasfemia, sino que simplemente le dijo: «¡Que el Señor te reprenda!». (Esto ocurrió cuando Miguel disputaba con el diablo acerca del cuerpo de Moisés).

Deut. 34.7 (RVR95) Tenía Moisés ciento veinte años de edad cuando murió; sus ojos nunca se oscurecieron, ni perdió su vigor.
Deut. 34.7 (DHH) Murió a los ciento veinte años de edad, habiendo conservado hasta su muerte buena vista y buena salud.

Nota: Moisés murió no por su edad avanzado, sino porque el Señor lo llamo.

Deut. 31.2 (NTV) dijo: «Ya tengo ciento veinte años y no puedo seguir guiándote. El SEÑOR me dijo: “No cruzarás el río Jordán”.

Nota: Ciento veinte años si es una larga tiempo.  La mayoría de gente muren entre 70 a 80 años.
Salmo 90.10 (NTV) ¡Setenta son los años que se nos conceden!  Algunos incluso llegan a ochenta. Pero hasta los mejores años se llenan de dolor y de problemas; pronto desaparecen, y volamos.

Nota: Josué, igual que Moisés, murió sin quedar débil físicamente.
Josué 14.10-11 (NTV) “Ahora, como puedes ver, en todos estos cuarenta y cinco años desde que Moisés hizo esa promesa, el SEÑOR me ha mantenido con vida y buena salud tal como lo prometió, incluso mientras Israel andaba vagando por el desierto. Ahora tengo ochenta y cinco años. 11 Estoy tan fuerte hoy como cuando Moisés me envió a esa travesía y aún puedo andar y pelear tan bien como lo hacía entonces.

Nota: Jacob casi perdió la vista en su edad avanzado (130 frente Faron, 17 en Egipto por 147 en total)
Gén. 48.10 (NTV) Jacob casi había perdido la vista debido a su avanzada edad y apenas podía ver. Entonces José le acercó a los muchachos, y Jacob los besó y los abrazó.

Deut. 34.8 (RVR95) Lloraron los hijos de Israel a Moisés en los campos de Moab treinta días; así se cumplieron los días de llanto y de luto por Moisés.
Deut. 34.8 (DHH) Los israelitas lloraron a Moisés durante treinta días en el desierto de Moab, cumpliendo así los días de llanto y luto por su muerte.

Nota: Después la muerte de Moisés, israelí estaba en luto por 30 días. Núm. 20.29
Núm. 20.29 (NTV) Cuando el pueblo se dio cuenta de que Aarón había muerto, todo Israel lo lloró por treinta días.

Deut. 34.9 (RVR95) Josué hijo de Nun estaba lleno del espíritu de sabiduría, porque Moisés había puesto sus manos sobre él, y los hijos de Israel lo obedecieron haciendo como Jehová mandó a Moisés.
Deut. 34.9 (DHH) Y Josué, hijo de Nun, recibió de Moisés sabiduría, pues Moisés puso sus manos sobre él; así que los israelitas le obedecieron e hicieron como el Señor había ordenado a Moisés.

Nota: Josué estaba lleno del espíritu de sabiduría.

Nota: Moisés puso sus manos sobre el a representar la trasferencia de poder, de liderazgo. Núm. 27.18
Núm. 27.18 (NTV) El SEÑOR le respondió: —Toma a Josué, hijo de Nun, en quien está el Espíritu, y pon tus manos sobre él.

Nota: Josué es instalado (impuso de manos) por Eleazar y Moisés.
Núm. 27.22–23 (NTV) Así que Moisés hizo lo que el SEÑOR le ordenó y presentó a Josué ante el sacerdote Eleazar y ante toda la comunidad. 23 Luego Moisés impuso sus manos sobre él y le entregó el cargo de dirigir al pueblo, tal como el SEÑOR había ordenado por medio de Moisés.

Deut. 34.10-12 (RVR95) Nunca más se levantó un profeta en Israel como Moisés, a quien Jehová conoció cara a cara; nadie como él por todas las señales y prodigios que Jehová le envió a hacer en tierra de Egipto, contra el faraón y todos sus siervos, y contra toda su tierra, 12 y por el gran poder y los hechos grandiosos y terribles que Moisés hizo a la vista de todo Israel.
Deut. 34.10-13 (DHH) Sin embargo, nunca más hubo en Israel otro profeta como Moisés, con quien el Señor hablara cara a cara, o que hiciera todos los prodigios y maravillas que el Señor le mandó hacer en Egipto contra el faraón, sus funcionarios y todo su país, o que le igualara en poder y en los hechos grandes e importantes que hizo a la vista de todo Israel.

Nota: Nunca había un profeta como Moisés (hasta la llegada de Jesús)
Deut. 18.15 (NTV) Moisés siguió diciendo: «El SEÑOR su Dios les levantará un profeta como yo de entre sus hermanos israelitas. A él tendrán que escucharlo,

Nota: El Señor hablaba con Moisés cara a cara.  Ningún otro profeta puede decir esto. Éxodo 33.11
Éxodo 33.11 (NTV) Dentro de la carpa de reunión, el SEÑOR hablaba con Moisés cara a cara, como cuando alguien habla con un amigo. Después, Moisés regresaba al campamento, mientras que su asistente, el joven Josué, hijo de Nun, permanecía en la carpa de reunión.

Nota: El Señor mediante Moisé,s hizo milagros y señales asombrosas en Egipto.  Ningún otro profeta puede decir esto. Deut. 4.34
Deut. 4.34 (NTV)  ¿Existe algún otro dios que se haya atrevido a sacar a una nación de otra nación y hacerla suya con mano fuerte y brazo poderoso por medio de pruebas, señales asombrosas, milagros, guerras, y hechos aterradores? Eso fue precisamente lo que el SEÑOR tu Dios hizo por ti en Egipto, frente a tus propios ojos.

Fin de Estudio: Deut. 34:1-12 Muerte de Moisés y Comisado de Josué.  

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