viernes, 28 de febrero de 2020

Estudio: Ap. 15:1-8 - Las siete últimas plagas


Punto de vista: PRETERISTA

Nota: Continuación de la profecía de la destrucción de Jerusalén (Babilonia).

Nota: David Chilton, Milton Terry, J. Stuart Russell y Philip Carrington, creen que los capítulos restantes (Ap. 12-19) continúan la profecía de la destrucción de Jerusalén (identificando a Babilonia también con Jerusalén). Chilton afirma que "la segunda mitad del Libro de Ap. cubre casi el mismo terreno que la primera, pero desde una perspectiva diferente". Gregg, S. (1997). Ap. cuatro puntos de vista: un comentario paralelo (págs. 252–254).

Nota: Greg dice que: Este capítulo da un preludio al juicio de los siete cuencos. Hubo una escena celestial de victoria en los capítulos 4–5, justo antes de la ruptura de los siete sellos, y un preludio similar en Ap. 8:1–6 anticipó las siete trompetas. Se dice que los juicios del tazón son las siete últimas plagas (Ap. 15:1), y provocarán el final de Jerusalén. El marco temporal es el final de la guerra judía (70 d. C.). Gregg, S. (1997). Revelación, cuatro puntos de vista: un comentario paralelo (p. 344).

Nota: Terry dice que: Los contenidos del cap. 15 son de la naturaleza de una introducción al derramamiento de los siete cuencos de ira (cap. 16), que se corresponderán sorprendentemente con las siete trompetas. Después del anuncio de las siete últimas plagas en el versículo 1, hay una visión de los vencedores cantando una canción de triunfo (versículos 2-4), y esta característica artística corresponde a la introducción de las multitudes, selladas por el Dios viviente y vestidas de blanco túnicas, cantando con los ángeles alrededor del trono (cap. 7), que se introdujo entre la apertura de los sellos sexto y séptimo y justo antes de que los siete ángeles fueran enviados a tocar las siete trompetas de la aflicción. Terry, M. S. (1898). Apocalipsis bíblicos: un estudio de las revelaciones más notables de Dios y de Cristo en las Escrituras canónicas (p. 413).

El cántico de victoria: De Moisés y el Cordero.  (Ap. 15:1-4)
Ap. 15.1 (RVR95) Vi en el cielo otra señal grande y admirable: siete ángeles con las siete plagas postreras, porque en ellas se consumaba la ira de Dios.
Ap. 15.1 (DHH) Vi en el cielo otra señal grande y asombrosa: siete ángeles con las siete últimas calamidades, con las cuales llegaba a su fin la ira de Dios.

Nota: Terry dice que: El último o El Fin: así llamado porque en ellos se ha acabado la ira de Dios. En ellos se consuma el derrocamiento absoluto de "Babilonia la Grande" (Ap. 16:19). Inmediatamente después de la séptima plaga (Ap. 16: 17–21) uno de los siete ángeles que tenían los siete tazones de plagas le mostró a Juan el apocalipsis especial de la caída de esta Babilonia la ramera (Ap. 17:1); y aún más adelante, uno de los mismos siete ángeles le mostró la visión correspondiente de la nueva Jerusalén, la novia, la esposa del Cordero (Ap. 21:9). Terry. Apocalipsis bíblicos: un estudio (p. 414).

Nota: Chilton dice: Ahora Juan nos habla de otra señal en el cielo, grande y maravillosa. Dos veces antes nos ha mostrado una gran señal en el cielo: la mujer vestida de sol (Ap. 12:1), y el gran dragón escarlata (Ap, 12:3). Chilton. Días de Retribución.

Nota: Chilton dice: Esta nueva señal inicia el clímax del libro: siete plagas, que son las últimas, porque en ellas se consuma la ira de Dios.
·         No hay razón para suponer que éstas deben ser las "últimas" plagas en un sentido universal; más bien, en términos del propósito y el alcance específicamente limitados del libro de Apocalipsis, ellas comprenden el derramamiento final de la ira de Dios, su gran juicio cósmico contra Jerusalén, aboliendo de una vez por todo el orden mundial del Antiguo Testamento.
·         Como la de las siete trompetas, esta serie de juicios ha de ser ejecutada por siete ángeles (como veremos en el siguiente capítulo, hay varios paralelos entre las proclamaciones hechas con el sonido de las trompetas y las libaciones derramadas de las copas).  Chilton. Días de Retribución.


Ap. 15.2 (RVR95) También vi como un mar de vidrio mezclado con fuego, y a los que habían alcanzado la victoria sobre la bestia y su imagen, sobre su marca y el número de su nombre, de pie sobre el mar de vidrio, con las arpas de Dios.
Ap. 15.2 (DHH) Vi también lo que parecía ser un mar de cristal mezclado con fuego; junto a ese mar de cristal estaban de pie, con arpas que Dios les había dado, los que habían alcanzado la victoria sobre el monstruo y su imagen, y sobre el número de su nombre.

Nota: Chilton dice que ahora: Comienza la visión:
·         Juan ve, por decirlo así, un mar de vidrio, el mar de cristal delante del trono de Dios (Ap. 4:6), que corresponde al "embaldosado" de zafiro visto por Moisés en la Montaña Sagrada (Ex. 24:10), la "expansión" de cristal azul a través de la cual pasó Ezequiel en su ascensión a la Nube de Gloria (Ez. 1:26), y el mar de bronce (el lavatorio) en el templo (1 Reyes 7:23-26).  Chilton. Dias de Retribucion.
·         Ahora Juan presenta a los santos:  regocijándose al borde del agua como Moisés y los israelitas se regocijaron después del cruce del Mar Rojo original (Ex. 14:30-31; 15:1-21), victoriosos sobre el monstruo del abismo; literalmente, son los que han vencido, los conquistadores, "porque es el carácter permanente de 'conquistador' sobre lo que se hace énfasis, no sobre el hecho de la conquista".
La descripción de su conquista es triple: han salido victoriosos sobre la bestia y su imagen y sobre el número de su nombre. Chilton. Dias de Retribucion.

Nota: Chilton: A la orilla del mar, en el borde de la fuente, los conquistadores ofrecen alabanza: De pie sobre el mar de vidrio, sosteniendo arpas de Dios, comprenden el nuevo coro sacerdotal del templo que está de pie en el lavatorio, por el cual fueron santificados.
·         Pablo describió la liberación en el Mar Rojo como un "bautismo" del pueblo de Dios (1 Cor. 10:1-2), y la tribulación era en verdad el bautismo de fuego de la Iglesia:  "Así, pues, la gran fuente de vidrio del mar se ve 'llena de una mezcla ardiente'. Aquéllo a través de lo cual los israelitas pasan para su salvación, sus perseguidores experimentan para su destrucción; Faraón y sus huestes perecen en las aguas que regresan. Y así, sabemos que el bautismo de fuego debe caer sobre el pueblo del anticristo; la visión de las fuentes [copas] nos mostrará cómo" Chilton - Días de Retribución.

Nota: Terry: Ap. 15:2. Un mar vidrioso mezclado con fuego: tan diferente del "mar vidrioso como el cristal" (Ap. 4:6) que formó el espacio abierto ante el trono. Esto tenía, así, una superficie lisa y brillante, como si fuera de vidrio, pero también tenía la apariencia de estar mezclada con fuego, como si reflejara el vasto mar de sangre del lagar de vino de la ira de Dios (Ap. 14:20). Terry. Apocalipsis bíblicos: un estudio (p. 414).

Nota: Terry: Esta alusión, así como la mención inmediata de "la canción de Moisés, el siervo de Dios", y la imagen completa del anfitrión triunfante muestran que las imágenes provienen del triunfo de Israel en el Mar Rojo. Allí, los ejércitos de Israel, parados en la orilla más alejada, a salvo de la persecución y persecución del faraón, "vieron a los egipcios muertos a la orilla del mar" (Ex. 14:30). Terry - Apocalípticos bíblicos: (p. 414).

Ap. 15.3 (RVR95) Y cantan el cántico de Moisés, siervo de Dios, y el cántico del Cordero, diciendo: «Grandes y maravillosas son tus obras, Señor Dios Todopoderoso; justos y verdaderos son tus caminos, Rey de los santos.
Ap. 15.3 (DHH) Y cantaban el canto de Moisés, siervo de Dios, y el canto del Cordero. Decían: “Grande y maravilloso es todo lo que has hecho, Señor, Dios todopoderoso; rectos y verdaderos son tus caminos, oh Rey de las naciones.

Nota: Terry Ap. 15:3. Cantan la canción de Moisés: es decir, una canción de victoria como la de Moisés en Ex. 15:1–18: "Entonces cantó Moisés y los hijos de Israel esta canción a Jehová, diciendo: Cantaré a Jehová, porque él ha triunfado gloriosamente: el caballo y su jinete arrojó al mar". Pero esta tensión de triunfo es algo más que esa vieja canción de Moisés: también es la canción del Cordero, que estaba en el Monte Sión con su “Israel redimido” (Ap. 14:1). Terry - Apocalípticos bíblicos: (p. 415).

Nota: Gregg dice que: Se ve una compañía que canta en el cielo, habiendo obtenido la victoria sobre la bestia (v. 2), probablemente a través del martirio.
·         Su canción (o canciones) se caracteriza por ser la canción de Moisés ... y la canción del Cordero (v. 3).
·         Es, por supuesto, el Cordero, y no Moisés, quien jugó un papel decisivo en la liberación de lo que cantan, pero la referencia a Moisés recuerda nuevamente el Éxodo y nos recuerda que Jerusalén se había convertido en el nuevo Egipto (Ap. 11:8).
·         La "canción de Moisés" original era la canción de liberación cantada por los israelitas cuando se encontraron permanentemente libres de su antiguo opresor (cf. Éxodo 15).
·         Como Egipto había perdido "caballo y jinete" en el Mar Rojo, los caballos de Jerusalén habían estado sumergidos en un virtual mar de sangre (¡un verdadero mar rojo! — Ap. 14:20). Gregg (1997). Apocalipsis, cuatro puntos de vista: un comentario paralelo (pp. 344–346).

Nota: Chilton explica que: Probablemente es imposible seguir completamente el rastro a las alusiones al Nuevo Testamento en el Cántico, pero por lo menos he anotado algunas de ellas:
·         Grandes y maravillosas son tus obras, oh Señor Dios Todopoderoso (Ex. 34:10, Deut. 32:3-4; 1 Crón. 16:8-12; Sal. 92:5; 111:2; 139:14; Is. 47:4; Jer. 10:16; Amos 4:13; comp. Ap. 1:8);
·         Juan dice claramente que los santos no están meramente haciendo una afirmación general de hecho, sino que se refieren específicamente a los "grandes y maravillosos" juicios finales en los cuales "la ira de Dios es consumada" (Ap. 15:1).

·         Justos y verdaderos son tus caminos (Deut. 32:4; Sal. 145:17; Oseas 14:9); nuevamente, se dice que Dios es "justo y verdadero" con referencia especial a sus juicios salvadores, librando a la Iglesia y destruyendo a sus enemigos (comp. Ap. 16:7).
·         "En tiempo de tribulación en la tierra, cuando el poder del mundo parece triunfar sobre la iglesia, a menudo ella ha sido inducida a dudar de la grandeza de las obras de Dios, la justicia y la verdad de sus caminos; a dudar de si Él era realmente el rey de los paganos. Ahora esta duda queda en vergüenza; es disipada por las obras; las nubes, que velaban la gloria de Dios ante sus ojos, se desvanecen por completo".

·         Tú eres rey de las naciones (Sal. 22:28; 47:2, 7-8; 82:8; comp. 1 Tim. 1:17; 6:15; Ap. 1:5; 19:16); como gobernante de todas las naciones, Él mueve todos los ejércitos de la tierra para cumplir sus propósitos en juicio; Él los aplasta por su rebelión; y los trae al arrepentimiento. Chilton. Dias de Retribucion.

Ap. 15.4 (RVR95) ¿Quién no te temerá, Señor, y glorificará tu nombre?, pues solo tú eres santo; por lo cual todas las naciones vendrán y te adorarán, porque tus juicios se han manifestado».
Ap. 15.4 (DHH) ¿Quién no te temerá, oh Señor? ¿Quién no te alabará? Pues solamente tú eres santo; todas las naciones vendrán y te adorarán, porque tus juicios han sido manifestados.”

Nota: Chilton comenta sobre Ap.15:4
·         ¿Quién no te temerá, oh Señor, y glorificará tu nombre? (Ex. 15:14-16; Jer. 10:6-7; comp. Ap. 14:7); esto significa, en lenguaje más familiar:
o   ¿Quién no se convertirá?
o   ¿Quién no servirá a Dios, no le adorará, y no le obedecerá?
·         La implicación clara es la de que: la abrumadora mayoría de todos los hombres vendrá a la salvación que Dios ha proporcionado en Cristo Jesús.
·         Esta es la gran esperanza de los padres del Antiguo Pacto, como lo atestiguan numerosos pasajes.
o   Pues sólo tú eres santo (Ex. 15:11; 1 Sam. 2:2; Sal. 99:3, 5, 9; Is. 6:3; 57:5, 15; Oseas 11:9; comp. Mat. 19:17; 1 Tim. 6:16).
·         La doctrina es declarada positivamente:
o   Porque todas las naciones vendrán y te adorarán, porque tus juicios se han manifestado (1 Crón. 16:28-31; Sal. 2:8; 22:27; 65:2; 66:4; 67:1-7; 86:8-9; 117:1; Isa. 26:9; 66:23; Jer. 16:19); la conversión de todas las naciones es tanto la meta última como el resultado inevitable de los juicios de Dios.
·          La caída de Israel, le está diciendo Juan a la Iglesia, traerá la salvación del mundo. Chilton. Dias de Retribucion.

Ap. 15.5 (RVR95) Después de estas cosas miré, y fue abierto en el cielo el santuario del tabernáculo del testimonio.
Ap. 15.5 (DHH) Después de esto, miré y vi abrirse en el cielo el santuario, la tienda de la alianza.

Nota: Terry - Se abrió el templo del tabernáculo del testimonio en el cielo. Este no puede ser otro que el templo de Ap. 11:19, que se vio que contenía el arca del pacto de Dios. Del mismo templo salieron los ángeles de Ap. 14:15, 17. La frase “el tabernáculo del testimonio” aparece en Hechos 7:44 (Septuaginta de Éxodo 29:10, 11), y fue llamada así porque contenía como su tesoro más preciado es el arca con las "dos tablas de testimonio" (Ex. 25:16; 31:18). Terry, Apocalípticos bíblicos: (p. 415).

Nota: Chilton Ap. 15:5 Ahora la escena cambia, y se nos muestra el Templo del Tabernáculo del Testimonio en el cielo, el "verdadero tabernáculo" (Heb. 8:2), el divino modelo, del cual el tabernáculo en la tierra era "figura y sombra" (Heb. 8:5; 9:11-12, 23-24; 10:1; Ex. 25:9, 40; 26:30; Num. 8:4; Hechos 7:44).

·         El documento de tratado básico del pacto era el Decálogo; éste era llamado a menudo el Testimonio, enfatizando su carácter legal como el registro del juramento del Pacto (Ex. 16:34; 25:16, 21-22; 31:18; 32:15; comp. Sal. 19:7; Is. 8:16; 20).
·         El tabernáculo, en el cual se guardaba el testimonio, se llamaba por lo tanto el tabernáculo del testimonio (Ex. 38:21; Num. 1:50, 53; 9:15; 10:11; Hech. 7:44).
·         Como hemos visto, en Apocalipsis el templo (naos en griego) es el santuario, o Lugar Santo (comp. Ap. 3:12; 7:15; 11:1-2, 19; 14:15, 17). Chilton. Dias de Retribucion.

Ap. 15.6-7 (RVR95) Del templo salieron los siete ángeles con las siete plagas, vestidos de lino limpio y resplandeciente y ceñidos alrededor del pecho con cintos de oro. 7 Uno de los cuatro seres vivientes dio a los siete ángeles siete copas de oro llenas de la ira de Dios, quien vive por los siglos de los siglos.
Ap. 15.6-7 (DHH) Del santuario salieron aquellos siete ángeles que llevaban las siete calamidades. Iban vestidos de lino limpio y brillante, y llevaban cinturones de oro a la altura del pecho. 7 Uno de los cuatro seres vivientes dio a cada uno de los siete ángeles una copa de oro llena de la ira de Dios, el cual vive por todos los siglos.

Nota: Terry Ap.15:6. Salieron del templo los siete ángeles. Entonces, en Ap. 14:17, el ángel con la hoz aguda salió del templo para ejecutar su obra de juicio. Terry Apocalípticos bíblicos: (p. 416).

Nota: Terry -  Una de las cuatro criaturas vivientes dio: el último acto registrado de estas criaturas vivientes fue llamar a los caballos de los primeros cuatro sellos (Ap. 6:1-8). Terry - Apocalípticos bíblicos: (p. 416).

Nota: Chilton - Los siete ángeles que tenían las siete plagas salieron del templo:
·         Para aplicar las maldiciones proclamadas por las trompetas.
·         Como sacerdotes del Nuevo Pacto, estos ángeles-ministros están vestidos de lino, limpio y resplandeciente, y ceñidos alrededor del pecho con cintos de oro, a imagen y semejanza de su Señor (Ap. 1:13; comp. Ex. 28:26-29, 39-43; Lev. 16:4). Chilton. Dias de Retribucion.


Nota: Chilton - He llamado copas a estos siete recipientes, para subrayar su carácter como un "sacramento negativo".
·         Desde un punto de vista, la substancia en las copas (la ira de Dios, que es "ardiente", Ap. 14:10) parece fuego, y varios comentaristas, por lo tanto, han visto los recipientes como fuentes de incienso (Ap. 5:8; comp. Ap. 8:3-5).
·         Pero, en Ap. 14:10, los impíos son condenados a "beber del vino de la ira de Dios, que está echado puro en la copa de su ira"; y, cuando las plagas son derramadas, el "ángel de las aguas" se regocija por lo apropiado de la justicia de Dios: "Por cuanto derramaron la sangre de los santos y de los profetas, también tú les has dado a beber sangre" (Ap. 16:6).
·         Algunos versículos más adelante, Juan regresa a la imagen de "la copa del vino del ardor de su ira" (Ap. 16:19).
·         Lo que está sirviendo de modelo en el cielo para la enseñanza de la Iglesia en la tierra es la excomunión final del Israel apóstata, cuando por fin le es negada la comunión del cuerpo y la sangre del Señor.

·         Los ángeles-obispos, a los cuales se les han confiado las sanciones sacramentales del pacto, son enviados desde el templo celestial mismo, y desde el trono de Dios, para derramar sobre Israel la sangre del pacto.

·         Jesús advirtió a los rebeldes de Israel que les enviaría sus mártires para que fueran muertos, "para que venga sobre vosotros toda la sangre justa que se ha derramado sobre la tierra, desde la sangre de Abel el justo hasta la sangre de Zacarías hijo de Berequías, a quien matásteis entre el templo y el altar. De cierto os digo que todo esto vendrá sobre esta generación" (Mat. 23:35-36).

·         Beber sangre es inescapable: O los ministros del Nuevo Pacto nos la sirven en la Eucaristía, o la derraman de sus copas sobre nuestras cabezas. Chilton. Dias de Retribucion.

Nota: Chilton - ¿Por qué en Apocalipsis la sangre ya no es rociada hacia el velo?
·         Porque la sangre de Jesús ya ha sido ofrecida, e Israel la ha rechazado. Como advertía el escritor de Hebreos justo antes del holocausto:

o   "Si pecáremos voluntariamente después de haber recibido el conocimiento de la verdad, ya no queda más sacrificio por los pecados, sino una horrenda expectación de juicio, y de hervor de fuego que ha de devorar a los adversarios. El que viola la ley de Moisés, por el testimonio de dos o de tres testigos muere irremisiblemente. ¿Cuánto mayor castigo pensáis que merecerá el que pisoteare al Hijo de Dios, y tuviere por inmunda la sangre del pacto en la cual fue santificado, e hiciere afrenta al Espíritu de gracia? Pues conocemos al que dijo: Mía es la venganza, yo daré el pago, dice el Señor. Y otra vez: El Señor juzgará a su pueblo. ¡Horrenda cosa es caer en manos del Dios vivo! (Heb. 10:26-31).

·         Ése es precisamente el argumento de Juan aquí: Sangre y fuego están a punto de ser derramados sobre la tierra de Israel desde las siete copas, que están llenos de la ira de Dios, que vive por los siglos de los siglos.
·         En realidad, la naturaleza eterna de Dios ("Vivo yo") se dio en el Cántico de Moisés como señal de su venganza contra sus enemigos, y los que derramaron la sangre de sus siervos (Deut. 32:40-43).
·         Así, se nos muestra que los siete ángeles con las plagas vienen del Tabernáculo del Testimonio, llevando en sus manos las maldiciones del Pacto; vienen del Templo, la Iglesia, como ministros que obligan en la tierra los decretos del cielo contra los que han rechazado el testimonio de Jesús; y vienen del trono de Dios mismo, habiendo recibido sus copas de ira de uno de los querubines que llevan el trono de Dios (Ap. 4:6). Chilton. Dias de Retribucion.

Ap. 15.8 (RVR95) Y el templo se llenó de humo por causa de la gloria de Dios y por causa de su poder. Nadie podía entrar en el templo hasta que se cumplieran las siete plagas de los siete ángeles.
Ap. 15.8 (DHH) Y el santuario se llenó del humo procedente de la grandeza y del poder de Dios, y nadie podía entrar en él hasta que hubieran terminado las siete calamidades que llevaban los siete ángeles.

Nota: TerryAp. 15:8. El templo estaba lleno de humo: esto concuerda con la visión de Isaías de la gloria de Jehová en su templo (Is. 6:4). Era una señal de la presencia invisible de Dios en su templo, y las imágenes son de Ex. 40:34, donde está escrito que "una nube cubrió la tienda de reunión, y la gloria de Jehová llenó el tabernáculo". Entonces esta nube de humo procedió de la gloria de Dios y de su poder. Terry, Apocalípticos bíblicos: (p. 416).

Nota: Chilton - Ap. 15:8 A la dedicación tanto del tabernáculo de Moisés como del templo de Salomón, el santuario se llenó del humo de la gloria de Dios y de su poder, y nadie podía entrar (véase Ex. 40:34-35; 1 Reyes 8:10-11; 2 Cron. 5:11-14; 7:1-3).
·         Como hemos visto, este fenómeno ocurrió en relación con el fuego celestial que descendía y consumía los sacrificios (Lev. 9:23-24; 2 Cron. 7:1-3).
·         El hecho de que el templo se llenara de humo era, pues, tanto una señal de la presencia de Dios llena de gracia con su pueblo como una impresionante revelación de su terrible ira contra los pecadores, una advetencia de que su juicio ardiente sería enviado desde el templo contra los que rebelasen contra él (para ejemplos de esto, véase Lev. 10:1-3; Num. 11:1-3; 16:35). Chilton.  Dias de Retribucion.

Nota: Chilton - Con la venida del Nuevo Pacto, la Iglesia de Jesucristo se convirtió en el templo de Dios.
·         Este nuevo suceso redentor fue indicado por el hecho de que el Espíritu llenó la Iglesia en el día de Pentecostés, como había llenado el tabernáculo y el templo.
·         Sin embargo, como Pedro había declarado, el derramamiento pentecostal sería acompañado al final de la era también por un derramamiento de holocausto: "Sangre, y fuego, y vapor de humo" (Hechos 2:16-21; comp. Joel 2:28-32).
·         Para que la Iglesia tomara posesión plena de su herencia, para que asumiera su correcto lugar como templo del Nuevo Pacto, la corrompida plataforma del Antiguo Pacto tenía que ser derribada y demolida.
·         A los cristianos de primera generación se les exhortaba continuamente a esperar el día, que se acercaba rápidamente, en que sus adversarios serían consumidos, y la Iglesia consagrada en sinagoga como el templo definitivo (2 Tes. 2:1; Heb. 10:25).
·         En el completo sentido de la plenitud y la "perfección" del Nuevo Pacto (1 Cor. 13:12), nadie podía entrar al templo sino hasta que las siete plagas de los siete ángeles hubiesen completado la destrucción del Israel del Antiguo Pacto. Chilton.  Dias de Retribucion.

Nota: Terry nota que: Ningún estudiante puede dejar de ver que los cuencos de ira, como se muestra en el cap. 16, corresponden de manera llamativa a las siete trompetas en la primera parte del libro.

·         Así, el primer cuenco como la primera trompeta afecta la tierra, el segundo el mar, el tercero los ríos y las fuentes, el cuarto el sol, el quinto el trono de la bestia, el sexto el Éufrates y el séptimo el aire, como si para despejar el camino para el reino de los cielos.
·         Pero estas correspondencias no son repeticiones exactas o una recapitulación, como sostuvieron algunos de los expositores más antiguos.
·         No hay repeticiones apocalípticas de simbolismo que sean exactamente paralelas.
·         Las imágenes posteriores siempre agregan algo a las anteriores, de modo que la repetición es de la naturaleza de una ilustración nueva y adicional.
·         Por lo tanto, se verá que las siete últimas plagas son más completamente destructivas que los problemas de la trompeta.
·         No se limitan a una tercera parte de la tierra, el mar y el sol, sino que provocan una ruina total.
·         Tampoco son divisibles en grupos de cuatro y tres, como los siete sellos y las trompetas, ni se deja espacio para imágenes laterales y episodios intermedios; pero la séptima tragedia continúa sin interrupción hasta que una gran voz desde el trono dice: "Ya está hecho".
·         Se alcanza el clímax y se declara el objeto de las plagas cuando se dice que "Babilonia la grande fue recordada ante los ojos de Dios, para darle la copa del vino de la ferocidad de su ira" (versículo 19).
Por lo tanto, las siete últimas plagas deben considerarse como una imagen intensificada del juicio consumidor. Terry Apocalípticos bíblicos: (págs. 416–417).


Fin de Estudio: Ap. 15:1-8- Las siete últimas plagas

miércoles, 26 de febrero de 2020

Estudio: Ap. 14:1-20 – Los Elegidos (salvados) y La Gran Babilonia (destruida)


Punto de vista: PRETERISTA

Nota: Continuación de la profecía de la destrucción de Jerusalén (Babilonia).

Nota: David Chilton, Milton Terry, J. Stuart Russell y Philip Carrington, creen que los capítulos restantes (Ap. 12-19) continúan la profecía de la destrucción de Jerusalén (identificando a Babilonia también con Jerusalén). Chilton afirma que "la segunda mitad del Libro de Ap. cubre casi el mismo terreno que la primera, pero desde una perspectiva diferente". Gregg, S. (1997). Ap. cuatro puntos de vista: un comentario paralelo (págs. 252–254).

Nota: Gregg dice: Se puede ver que el Capítulo 14 culmina la sección anterior o que introduce lo que sigue. O puede estar solo. Contiene elementos que se introdujeron anteriormente en el libro (es decir, los 144,000, Ap. 7) y también elementos que no se han discutido previamente pero que serán el foco de capítulos posteriores (es decir, la caída de Babilonia, Ap. 14:8, cf. cap. Ap. 16-18). Gregg, S. (1997). Revelación, cuatro puntos de vista: un comentario paralelo (p. 310).

Nota: Chilton introduce Ap. 14 con este sumario: Juan acaba de revelarnos la malvada tríada de enemigos que enfrentan a la Iglesia primitiva: el dragón, la bestia que sube del mar, y la bestia que sube de la tierra.
·         Juan ha dado a entender claramente que estos enemigos son implacables, que el conflicto con ellos requerirá fidelidad hasta la muerte. Naturalmente, surge de nuevo la pregunta: ¿Sobrevivirá la Iglesia a un ataque tan encarnizado?
·         En esta sección final de la cuarta división principal de su profecía, por lo tanto, Juan nuevamente discute estos temores de su auditorio.
·         La acción del libro se detiene mientras el apóstol consuela y da razones para tener confianza en la victoria venidera de la Iglesia sobre todos sus oponentes.

Nota: Terry dice que:  "La revelación de los tres grandes enemigos, el dragón, la bestia que sube del mar, y la bestia que sube de la tierra, es seguida inmediatamente por una séptuple revelación de victoria y juicio en los cielos. El propósito de estas visiones y voces desde el cielo es obviamente para mostrar que los poderes de los cielos son más poderosos que los de la serpiente infernal y sus asociados. La trinidad de fuerzas hostiles, armadas con muchas maravillas engañosas, parecería invencible desde un punto de vista humano. Pero Juan, como el joven siervo de Eliseo cuando fue confrontado con los caballos y los carruajes y la inmensa hueste del rey de Siria, es amonestado aquí en el sentido de que los que están con la Iglesia perseguida son más numerosos y más poderosos que los que hacen guerra contra ella (2 Reyes 6:15-17)". Terry, M. S. (1898). Apocalipsis bíblicos: un estudio de las revelaciones más notables de Dios y de Cristo en las Escrituras canónicas (p. 402).


El Cordero: Ap. 14:1–5
Ap. 14.1 (RVR95) Después miré, y vi que el Cordero estaba de pie sobre el monte de Sión, y con él ciento cuarenta y cuatro mil que tenían el nombre de él y el de su Padre escrito en la frente.
Ap. 14.1 (DHH) Vi al Cordero, que estaba de pie sobre el monte Sión. Con él había ciento cuarenta y cuatro mil personas que tenían escrito en la frente el nombre del Cordero y de su Padre.

Nota: Chilton dice que: El Cordero de pie sobre el monte es un símbolo de la victoria de Cristo sobre todos sus enemigos, con su pueblo restaurado al Edén y a la comunidad con Dios.
·         El hecho de que el monte es Sión sirve para resaltar esta victoria, porque Sión es el especial "santo monte" de Jerusalén, el símbolo de la presencia de Dios con su pueblo y su reinado victorioso sobre la tierra, cuando todos los reinos sean reunidos para servirle a Él en el Nuevo Pacto. Chilton. Días de Retribución.

El Cordero: Ap. 5:9–13
·         El Cordero: el mismo Cordero que recibió la adoración divina de Ap. 5:9-13 y abrió el libro de los siete sellos. Terry, M. S. (1898). Apocalipsis bíblicos: un estudio de las revelaciones más notables de Dios y de Cristo en las Escrituras canónicas (p. 403).

·         Parado en el Monte Sión: El Monte Sión debe entenderse aquí como “el Sión celestial”, el asiento dela nueva Jerusalén” que está arriba y que es nuestra madre (Gal. 4:26). En esta montaña sagrada se levantará el nuevo templo de Dios en el cielo (Ap. 11:19). Terry - Apocalipsis bíblicos: (p. 403).


·         Nota: Chilton dice que: Por lo tanto, el Cordero no está solo en Sión, porque su pueblo comparte su victoria!
o   Están allí con Él, los ciento cuarenta y cuatro mil, el Remanente de Israel ordenó la batalla según las miles de sus tribus (Ap. 7:4-8).
o   Vimos que la Marca de la Bestia (Ap. 13:16-17) era la parodia del sellamiento divino del verdadero Israel (Ap. 7:2-8); ahora San Juan nos recuerda el sellado original, la marca de la propiedad de Dios y la protección de su pueblo obediente.
o   La combinación de imágenes previas de John subraya que los 144,000 son considerados como miembros de la Iglesia, y no como una categoría separada de israelitas étnicos.
o   Se nos dijo antes que los 144,000 están sellados en sus frentes (Ap. 7:3), mientras que son todos los vencedores de Cristo quienes tienen Su nombre y el nombre de Su Padre escrito en sus frentes (Ap. 3:12).
o   Los 144,000, por lo tanto, pertenecen a la Iglesia, el ejército de vencedores. Sin embargo, también son un grupo especial: la Iglesia remanente de la primera generación. Chilton Días de venganza.

·         Los ciento cuarenta y cuatro mil: no son diferentes de "los que adoran en él", como se mide en Ap. 11:1. Siendo las "primicias para Dios y para el Cordero" (Ap. 11:4), son las mismas que las doce veces doce mil de Ap. 7:4–8. En esa visión anterior, estaban representados como sellados en sus frentes como los siervos de Dios; aquí aparecen como de pie con el Cordero en Sión, con su nombre y el nombre de su Padre, escritos en sus frentes. Terry - Apocalípticos bíblicos: (p. 403).

·         El objetivo de la visión es mostrar que mientras el viejo dragón está en guerra con la simiente de la mujer (Ap. 12:17), e incluso emplea la fuerza proscriptica del imperio mundano para asegurar sus diseños corruptos, una nueva y santa congregación se está reuniendo en el Monte Sión y aprendiendo allí a cantar una nueva canción conocida solo para los redimidos, o para ese selecto "primicias" cuya excelencia se exalta aquí. Terry - Apocalipsis bíblicos: un estudio (p. 403).

Ap. 14.2 (RVR95) Oí una voz del cielo como el estruendo de muchas aguas y como el sonido de un gran trueno. La voz que oí era como de arpistas que tocaban sus arpas.
Ap. 14.2 (DHH) Luego oí un sonido que venía del cielo; era como el sonido de una cascada, como el retumbar de un fuerte trueno; era un sonido como el de muchos arpistas tocando sus arpas.

·         Nota: Chilton: Con sus ojos sobre el Cordero y su ejército, Juan oye una voz desde el cielo, el conocido recordatorio de la presencia de Dios en la Nube de Gloria: como el sonido de muchas aguas y como el sonido del trueno, y como el sonido de arpistas que tocan sus arpas, la orquesta celestial que toca en acompañamiento al cántico de victoria del ejército de los santos, que cantan un nuevo cántico delante del trono y delante de los cuatro seres vivientes y de los ancianos. Chilton. Días de Retribución.

·         Una voz del cielo: se dan tres comparaciones para realzar en nuestras mentes las maravillosas cualidades de esta voz: ¡era como muchas aguas, como un gran trueno y como arpistas tocando con sus arpas! Su volumen no parecía tomar nada de su encantadora melodía, y en conjunto era un sonido de canción celestial tan magnífica y armoniosa que implicaba nuevos triunfos de Dios y del Cordero. Terry (1898). Apocalipsis bíblicos: un estudio (p. 403).

Ap. 14.3 (RVR95) Cantaban un cántico nuevo delante del trono y delante de los cuatro seres vivientes y de los ancianos. Nadie podía aprender el cántico, sino aquellos ciento cuarenta y cuatro mil que fueron redimidos de entre los de la tierra.
Ap. 14.3 (DHH) Y cantaban un canto nuevo delante del trono y delante de los cuatro seres vivientes y de los ancianos. Ninguno podía aprender aquel canto, sino solamente los ciento cuarenta y cuatro mil que fueron salvados de entre los de la tierra.

·         Nota: Chilton: Como hemos visto en Ap. 5:9, el cántico nuevo es la nueva liturgia requerida e introducida por la nueva era en la historia de la redención. Y esta liturgia, la jubilosa respuesta de los redimidos, pertenece a la Iglesia solamente (Ap. 2:17): Ninguno podría aprender el cántico, excepto los ciento cuarenta y cuatro mil que han sido redimidos de la tierra, redimidos como esclavos de la tiranía de la bestia que sube de la tierra. Chilton. Días de Retribución.

Nota:  J. Stuart Russell ¿Es posible creer que el escritor de la Epístola a los Hebreos no tuvo esta visión en sus pensamientos cuando escribió ese noble pasaje: "Han venido al monte Sión, la ciudad del Dios viviente, la Jerusalén celestial", etc. ? 
·         Los puntos de semejanza son tan marcados y tan numerosos que no puede ser accidental.
·         La escena es la misma, Monte Sion; las dramatis person ... son lo mismo, "la asamblea general y la iglesia de los primogénitos, que están escritas en el cielo", correspondientes a los ciento cuarenta y cuatro mil que llevan el sello de Dios.
·         En la epístola se les llama 'la iglesia del primogénito'; la visión explica el título: 'son los primeros frutos para Dios y para el Cordero'; los primeros se convierten a la fe de Cristo en la tierra de Cristo.
·         Judea En la epístola, son designados "espíritus de hombres justos hechos perfectos"; en la visión son "vírgenes sin mancha, en cuya boca no se halló engaño; porque no tienen culpa ante el trono de Dios ".
·         Tanto en la visión como en la epístola encontramos "la innumerable compañía de ángeles “y " el Cordero ", por quien se logró la redención.
En resumen, se coloca más allá de toda duda razonable que, dado que no se puede suponer que el autor del Apocalipsis haya extraído su descripción de la epístola, el escritor de la epístola debe haber derivado sus ideas e imágenes del Apocalipsis. Russell, J. S. (1878). La parusía: una investigación crítica sobre la doctrina del Nuevo Testamento de la segunda venida de nuestro Señor (pp. 469-470).

Ap. 14.4-5 (RVR95) Estos son los que no se han contaminado con mujeres, pues son vírgenes. Son los que siguen al Cordero por dondequiera que va. Estos fueron redimidos de entre los hombres como primicias para Dios y para el Cordero. 5 En sus bocas no fue hallada mentira, pues son sin mancha delante del trono de Dios.
Ap. 14.4-5 (DHH) Estos son vírgenes, no se contaminaron con mujeres; son los que siguen al Cordero por dondequiera que va. Fueron salvados de entre los hombres como primera ofrenda para Dios y para el Cordero. 5 No se encontró ninguna mentira en sus labios, pues son intachables.

Nota: Chilton nota que:
San Juan da más descripciones de los redimidos: estos son los que no han sido contaminados con mujeres, porque son hombres castos. Chilton - Días de venganza.
·         La Virgen se usa con frecuencia en el Antiguo Testamento para Sion, el pueblo de Dios (2 Reyes 19:21; Isa. 23:12; 37:22; Jer. 14:17; 18:13; 31: 4, 21; Lam. 1:15; 2:13).
·         Más particularmente, la castidad aquí es una referencia simbólica al requisito de abstinencia sexual por parte de “los sacerdotes- soldados” durante la guerra santa (cf. Ex. 19:15; Lev. 15:16; Deut. 20:7; Deut. 23:10-11; 1 Sam.21:4-5; 2 Sam.11:8-11). Chilton - Días de venganza.

Nota: Chilton Juan nos dice, además, que estos soldados son” los que siguen al Cordero dondequiera que va”, siendo el término seguir una metáfora típica de la obediencia de un discípulo (Mat. 9:9; 10:38; 16:24; Mar. 9:38; 10:21, 28; Luc. 9:23; Juan 8:12; 10:4-5, 27; 21:22). Chilton. Dias de Retribucion.

·         Finalmente, dice Juan, ninguna mentira fue hallada en sus bocas, porque son sin mancha. Es el dragón el que es el engañador, el calumniador, el padre de la mentira (Juan 8:44; Ap. 12:9); el pueblo de Dios se caracteriza por hablar verdad (Ef. 4:24-27).

·         Como declaró Pablo en relación con los paganos, la mentira básica es la iolatría:
o   "Profesando ser sabios, se hicieron necios, y cambiaron la gloria del Dios incorruptible en semejanza de imagen de hombre corruptible, de aves, de cuadrúpedos y de reptiles.... Cambiaron la verdad de Dios por la mentira, honrando y dando culto a las criaturas antes que al Creador, el cual es bendito por los siglos. Amén" (Rom. 1:22-25).

·         Básicamente, la mentira es profecía falsa (Jer. 23), rendirle honor y gloria a la criatura en lugar de al Creador. Hemos visto que el conflicto entre la profecía verdadera y la falsa, entre los profetas-siervos que testifican y el falso profeta, es central al tema del Libro de Apocalipsis. En oposición a sus enemigos, la Iglesia lleva y proclama la verdad.  Chilton. Dias de Retribucion.

Nota: Terry
·         "Comprado de entre los hombres" - Repetido en sustancia del versículo 3, pero definido más particularmente como de entre los hombres en lugar de "de la tierra" para indicar su carácter elegido y precioso como "primicias para Dios y para el Cordero".
·         Los confesores y mártires de la Iglesia apostólica, que vencieron en razón de su testimonio y la sangre del Cordero, se declaran así como primicias (ἀπαρχή), una selección elegida de la innumerable compañía de santos. El propósito de este Apocalipsis era dar consuelo especial y aliento a estos espíritus vírgenes. Terry, M. S. (1898). Apocalipsis bíblicos: un estudio (p. 404).

Nota: Terry
·         "En su boca no se halló mentira", porque, como su Señor, son santos y verdaderos (Ap. 3:7). Parece que aquí hay una apropiación del lenguaje y el pensamiento de Zeph. 3:13: El remanente de Israel no hará iniquidad, ni hablará mentiras; ni una lengua engañosa se encontrará en su boca”. También Isa. 53:9.
·         "No tienen mancha": esto completa la descripción y le da un acabado admirable. No se encuentra ningún punto de ningún tipo en ellos. Contraste los asesinatos, brujerías, fornicación y robos de Ap. 9:21. Terry (1898). Apocalipsis bíblicos: un estudio (p. 404).

Nota: Chilton -
·         Así, mientras la aplicación específica de los 144.000 es para la iglesia de la primera generación, en principio son vistos como la Iglesia en su totalidad (lo cual, en el tiempo en que Juan escribía, era precisamente).

·         Esto queda confirmado por una comparación de los paralelos entre este pasaje (Ap. 14:1-5) y la descripción de los redimidos en Ap. 5:6-11

·         Ap. 14:1 Después miré, y he aquí el Cordero estaba de pie....
·         Ap. 5:6 Y vi... que estaba en pie... un Cordero...

·         Ap. 14:3 ... delante del trono, y delante de los cuatro seres vivientes, y de los ancianos.
·         Ap. 5:6 en medio del trono y de los cuatro seres vivientes, y de los ancianos.

·         Ap. 14:2 la voz... era como de arpistas que tocaban sus arpas.
·         Ap. 5:8 los veinticuatro ancianos... todos tenían arpas.

·         Ap. 14:3 Y cantaban un cántico nuevo...
·         Ap. 5:9 Y cantaban un nuevo cántico.

·         Ap. 14:4 Estos fueron redimidos de entre los hombres como primicias para Dios y para el Cordero.
·         Ap. 5:9 [El Cordero] nos ha redimido para Dios, de todo linaje y lengua y pueblo y nación. Chilton. Días de Retribución.

Ap. 14.6-7 (RVR95) En medio del cielo vi volar otro ángel que tenía el evangelio eterno para predicarlo a los habitantes de la tierra, a toda nación, tribu, lengua y pueblo. 7 Decía a gran voz: «¡Temed a Dios y dadle gloria, porque la hora de su juicio ha llegado! ¡Adorad a aquel que hizo el cielo y la tierra, el mar y las fuentes de las aguas!».
Ap. 14.6-7 (DHH) Vi otro ángel, que volaba en medio cielo y que llevaba un mensaje eterno para anunciarlo a los que viven en la tierra, a todas las naciones, razas, lenguas y pueblos. 7 Decía con fuerte voz: “Teman a Dios y denle alabanza, pues ya llegó la hora en que él ha de juzgar. Adoren al que hizo el cielo y la tierra, el mar y los manantiales.”

Nota: Terry dice:
·         Tener un evangelio eterno para proclamar" - El orden de las palabras en griego es digno de mención: tener buenas noticias eternas para anunciar como buenas noticias (εὐαγγελίσαι). Aunque sin el artículo, este evangelio eterno no es otro que "el evangelio del reino" que Jesús declaró debe ser "predicado en todo el mundo para dar testimonio a todas las naciones" antes de que venga el culto judío y el templo (Mat. 24:14).
·         Se le llama apropiadamente un evangelio eterno, porque fue declarado desde la antigüedad como una bendita esperanza para los padres y profetas (Ap. 10:7), "fue predicado en toda la creación bajo el cielo" por los apóstoles (Col. 1:23), y sus verdades salvadoras son el consuelo y la alegría de la Iglesia a través de todas las edades.
·         La proclamación del Evangelio a los que habitan en la tierra parece ser una referencia a la primera predicación de los apóstoles a los judíos de Palestina, a diferencia de la posterior proclamación de Cristo a cada nación, tribu, lengua y pueblo, después de ella. se hizo manifiesto que "a los gentiles también Dios les dio arrepentimiento a la vida" (Hechos 11:18). Terry, (1898). Apocalipsis bíblicos: (pp. 405-406).

Nota: Chilton.
·         El resto de este capítulo está dividido en siete secciones - una visión del Cristo glorificado, flanqueado a cada lado por tres ángeles.
·         Juan está a punto de hacer la transición entre las trompetas-visiones (proclamaciones de juicio) y los cálices-visiones (aplicaciones de juicio).
·         Prediciendo este cambio, los primeros tres ángeles hacen proclamaciones especiales en relación con la victoria del Cordero, y los últimos tres ángeles llevan a cabo acciones para ayudarle a implementar su conquista. Chilton. Dias de Retribucion.

Nota: Chilton -  Juan ve otro ángel volar por en medio del cielo, la esfera en la cual el ángel exclama “sus ayes” sobre la tierra (Ap. 8:13). Pero este ángel predica paz: El juicio venidero no es un fin en sí mismo, sino parte de la proclamación del evangelio eterno. Chilton. Dias de Retribucion.
·         Es el mensaje de la venida del reino, como lo habían anunciado Juan y Jesús desde el principio:
o   "En aquellos días vino Juan el Bautista predicando en el desierto de Judea, y diciendo: Arrepentíos, porque el reino de los cielos se ha acercado" (Mat. 3:1-2);
o   "Después de que Juan fue encarcelado, Jesús vino a Galilea predicando el evangelio del reino de Dios, y diciendo: El tiempo se ha cumplido, y el reino de Dios se ha acercado; arrepentíos, y creed en el evangelio" (Mar. 1:14-15).

·         Y este es el evangelio predicado por el ángel, siendo cada uno de los elementos en él un aspecto del mensaje del Nuevo Testamento:
o   Temed a Dios (Lucas 1:50; 12:5; Hechos 10:35), y dadle gloria (Mat. 5:16; 9:8; 15:31), porque la hora de su juicio es venida (Juan 12:23, 31-32; 16:8-11); y adorad a aquél que hizo el cielo y la tierra y el mar (el mundo, Gén. 1) y las fuentes de las aguas (el paraíso, Gén. 2).

·         Todo esto es marcadamente similar a lo que está registrado del evangelio apostólico (Hechos 14:15; 17:24-31).  Chilton. Dias de Retribucion.

Nota: Chilton dice que: El ángel predica este evangelio a “los que se sientan en la tierra.”
·         La expresión usual para los apóstatas israelitas es “los que moran en la tierra” (Ap. 3:10; 13:8, 12, 14; 17:2, 8).
·         Esta vez, la atención se enfoca en el mensaje a “las autoridades de Israel”, las que están sentadas o entronizadas en la tierra (el verbo es el mismo que se usó en el v. 14, del Hijo del Hombre entronizado en la Nube).
·         El mensaje del evangelio ordenaba a los gobernantes de Palestina someterse al señorío de Cristo, para honrarle, más bien que a César, como Dios.
·          Pero los gobernantes y las autoridades le rechazaron, diciendo: "No queremos que éste reine sobre nosotros" (Lucas 19:14).

·         El Señor mismo proclamó la gloria y el juicio de Dios a las autoridades de Israel (Mat. 26:64), y adivirtió a sus discípulos que ellos predicarían un evangelio que resultaría impopular a los dirigentes:

o   "Guardaos de los hombres, porque os entregarán a los concilios, y en sus sinagogas os azotarán; y aun ante gobernadores y reyes seréis llevados por causa de mí, para testimonio a ellos y a los gentiles" (Mat. 10:17-18).

o   Además, "será predicado este evangelio del reino en todo el mundo, para testimonio a todas las naciones; y entonces vendrá el fin" (Mat. 24:14).

·         Y este era el orden del evangelio - primero a los judíos, y luego a los gentiles (Hechos 3:26; 11:18; 13:46-48; 28:23-29; Rom. 1:16; 2:9): El ángel predica a los dirigentes de Palestina, y luego a toda nación y tribu y lengua y pueblo.

·         Antes de que viniera el fin en el año 70 d.C., nos dice Pablo, el evangelio fue realmente predicado a todo el mundo (Rom. 1:8; Rom. 10:18; Col. 1:5-6; 23).

·         A pesar de los intentos del dragón y sus dos bestias por estorbar el progreso del evangelio, la misión de los apóstoles, los evangelistas, los mártires, y los confesores de la iglesia primitiva tuvo éxito. El mundo fue evangelizado. Chilton. Días de Retribución.

Nota: Terry sobre Ap. 14.7 dice "Teme a Dios y dale gloria" — Comp. Ap. 11:13.
El Evangelio tiene su mensaje de miedo y de alegría.
·         Los terrores del Señor son un medio para persuadir a los hombres (2 Cor. 5:11), y el acercamiento cercano a la hora de su juicio fue una parte importante de la predicación de la era apostólica (Hechos 10:42; 17:31; 24:25).
·         Adora al que hizo el cielo, ¡no a la bestia ni a su imagen! (comp. Ap. 14: 9 y Ap. 13:12, 15).
·         Solo el que creó todas las cosas es digno de recibir la gloria y el honor (comp. Ap. 4:11 e Isa. 40:12). Terry (1898). Apocalípticos bíblicos: (p. 406).

Ap. 14.8 (RVR95) Otro ángel lo siguió, diciendo: «Ha caído, ha caído Babilonia, la gran ciudad, porque ha hecho beber a todas las naciones del vino del furor de su fornicación».
Ap. 14.8 (DHH) Lo siguió un segundo ángel, que decía: “¡Ya cayó, ya cayó la gran Babilonia, la que emborrachó a todas las naciones con el vino de su prostitución!”

Nota: Chilton comenta sobre este versículo: Otro ángel, el segundo, sigue, presentando otro aspecto de la proclamación de la iglesia primitiva: ¡Ha caído, ha caído Babilonia la grande!
·         Esta es la primera vez que se menciona a "Babilonia" en Apocalipsis, una referencia proléptica anticipando la exposición plena que habría de venir en capítulos posteriores (similar a la primera referencia a la bestia en 11:7).
·         Sin embargo, es ciertamente posible que los lectores de Juan entendieran en seguida lo que él quería decir.
o   En su primera epístola, que se supone fue escrita antes del Apocalipsis, Pedro describió a la iglesia local de la cual escribía como "la que está en Babilonia" (1 Ped. 5:13).
o   Muchos han supuesto que esta es Roma, donde Pedro fue martirizado más tarde (según la tradición); pero es mucho más probable que el apóstol estuviera en Jerusalén cuando escribió estas palabras.
o   Basándonos en informaciones del mismo Nuevo Testamento, nuestra natural suposición sería que "Babilonia" era Jerusalén, puesto que fue allí donde el apóstol vivió y ejerció su ministerio (Hechos 8:1; 12:3; Gál. 1:18; 2:1-9; 1 Ped. 4:17).
o   Además, la primera epístola de Pedro también envía saludos de Marcos y Silas [Silvano] (1 Ped. 5:12-13), los cuales vivían en Jerusalén (Hechos 12:12; 15:22-40). Chilton. Dias de Retribucion.

Nota: Chilton dice:  El término [Babilonia] denomina a la ciudad apóstata, del mismo modo que "Sodoma" y "Egipto" se usaron en Ap. 11:8 para describir a "la gran ciudad...donde el Señor fue crucificado" La razón de que Juan aplique la palabra a Jerusalén es que Jerusalén se ha convertido en Babilonia, una copia de la orgullosa, idólatra, y perseguidora opresora del pueblo de Dios Chilton.. Dias de Retribucion.

Nota: Terry dice: Otro, un segundo ángel: cada anuncio tiene su ángel especial. Apenas el ángel del Evangelio eterno hizo su proclamación que otro seguido, anunciando la caída de Babilonia la grande.
·         Esta gran Babilonia se menciona aquí proléticamente, como lo fue la bestia del abismo en Ap. 11:7; pero el retrato más completo está reservado para una revelación especial en capítulos (Ap.) 17 y 18.
·         Una alusión proleptica similar se hace nuevamente en Ap. 16:19. El lenguaje es apropiado de Is. 21:9 y Jer. 51:7-8, y debe entenderse aquí como un decreto de fatalidad, anunciado con seguridad profética como si la caída ya hubiera ocurrido.
·         El nombre de Babilonia se emplea simbólicamente y, como Sodoma y Egipto en Ap. 11:8, debe explicarse por medio de las asociaciones históricas que la gran ciudad del Éufrates sugeriría más naturalmente al pensamiento judío.
·         Babilonia se representa en los profetas del Antiguo Testamento como el orgulloso opresor, el perseguidor insolente, lleno de abominables idolatrías y de todo tipo de maldad.
·          El nombre se usa, en consecuencia, en este libro para designar a “la mujer” de Ap. 17:3-4, “la madre de las rameras y de las abominaciones de la tierra” (Ap. 17:5), “borracha con la sangre de los santos”, cometiendo fornicación con los reyes de la tierra, y convertirse en una "habitación de demonios y un dominio de todo espíritu inmundo y de todo pájaro inmundo y odioso" (Ap. 18:2), y "tener dominio sobre los reyes de la tierra" (Ap. 17:18).
·         Que esta gran ciudad no es otra que Jerusalén, el asesino de los profetas, lleno de hipocresía y extorsión y toda impureza, el poder de una generación de víboras, y borracho de superstición e idolatría espiritual y esquemas de poder mundano, se mostrará en el notas sobre el cap. 17.
·         Como Jesús en Matt. 24:14, dijo que el final de esta ciudad y la era pre-mesiánica seguirían a la predicación del Evangelio entre las naciones, por lo que en este Apocalipsis, la proclamación de la caída de Babilonia, el gran sigue inmediatamente después del Evangelio eterno.
·         El vino de la ira de su fornicación: esta expresión peculiar es una adición al lenguaje de Jeremías. Ese profeta habla de "Babilonia, una copa de oro en la mano de Jehová, que embriagó a toda la tierra: las naciones bebieron de su vino; por eso las naciones están locas” (Jer. 51:7).
·         En consecuencia, algunos explican las palabras vino de la ira de su fornicación como equivalente al vino inflamatorio de su fornicación. Sus pecados asquerosos se conciben como un vino tan caliente y embriagador que emborracha a otros como ella. Pero es mejor entender la palabra ira (θυμός) aquí como en el versículo 10 de “la ira de Dios”, de modo que tengamos el doble pensamiento de que el vino de su fornicación es también el vino de la ira de Dios. Terry (1898). Apocalípticos bíblicos: (págs. 406–407).


·         Nota: Chilton comenta - Esta gran ciudad-ramera (Ap. 17:1) ha hecho beber a todas las naciones del vino del calor de su fornicación.
o   La palabra generalmente traducida como ira básicamente significa calor.
o   En el versísulo 10, la idea es definidamente de ira, pero aquí Juan está simplemente usando al familiar cuadro bíblico del Israel apóstata como ramera, que inflama las pasiones de los hombres con el calor de la lascivia.
o   Israel ha abusado de su privilegiada posición como la divinamente ordenada "guía de ciegos" y "luz a los que están en tinieblas" (Rom. 2:19).
o   Las naciones esperaban recibir de ella enseñanza, pero terminaron blasfemando el nombre de Dios a causa de su impiedad (Rom. 2:24).
o   Dios quería que ella fuera la señora Sabiduría, y que llamara a todos los hombres a que comieran de su alimento, bebieran de su vino, y vivieran en el camino de la inteligencia (Pr. 9:1-6).
o   En vez de eso, se había convertido en la señora Desatino, que usaba mercadería robada para tentar a los hombres a caer en las profundidades del infierno (Pr. 9:13-18).
o   Como la bestia que subía de la tierra (el falso profeta que habla como dragón), la principal ocupación de Babilonia es seducir a otros para que caigan en fornicación, la adoración de dioses falsos. Chilton. Dias de Retribucion.

Ap. 14.9-11 (RVR95) Y un tercer ángel los siguió, diciendo a gran voz: «Si alguno adora a la bestia y a su imagen y recibe la marca en su frente o en su mano, 10 él también beberá del vino de la ira de Dios, que ha sido vaciado puro en el cáliz de su ira; y será atormentado con fuego y azufre delante de los santos ángeles y del Cordero. 11 El humo de su tormento sube por los siglos de los siglos. No tienen reposo de día ni de noche los que adoran a la bestia y a su imagen, ni nadie que reciba la marca de su nombre».
Ap. 14.9-11 (DHH) Luego los siguió otro ángel, el tercero, que decía con fuerte voz: “Si alguno adora al monstruo y a su imagen, y se deja poner su marca en la frente o en la mano, 10 tendrá que beber el vino de la ira de Dios, que se ha preparado puro en la copa de su enojo; y será atormentado con fuego y azufre delante de los santos ángeles y del Cordero. 11 El humo de su tormento sube por todos los siglos, y no hay descanso de día ni de noche para los que adoran al monstruo y a su imagen y reciben la marca de su nombre.”


Nota: Chilton comenta sobre este versículo:
·         Y otro ángel, el tercero, les siguió, con un mensaje apropiado de muerte para cualquiera que adore a la bestia y a su imagen, o recibe una marca en su frente o en su mano (Ap. 13:15-18).
·         La gran ofensa de la bestia que sube de la tierra - la dirigencia religiosa del Israel apóstata - fue fomentar y hacer cumplir la adoración de la bestia (Ap. 13:11-17).
·         Así, Juan nos está dando un indicio de la identidad de la gran ciudad repitiendo sus palabras sobre la bestia que subía de la tierra inmediatamente después de su primera afirmación sobre "Babilonia".
·         También recuerda a los cristianos, especialmente a los "ángeles", los dirigentes de la Iglesia, de su deber de proclamar el consejo entero de Dios.
o   Debían predicar el inflexible mensaje del exclusivo y abarcante señorío de Jesucristo contra todos los pretendientes al trono.
o   Debían hablar proféticamente a su generación, condenando severamente la adoración de la bestia, advirtiéndoles que los que bebieran de la herética copa del culto al estado de Babilonia también beberían del vino de la ira de Dios, que está vaciado puro - literalmente, sin mezcla alguna en el cáliz de su ira.
·         La amonestación es clara: No se puede beber de una copa sin beber de la otra. Chilton. Dias de Retribucion.

Nota: Moses Stuart explica las imágenes:  "A menudo se dice que Dios da la copa de inflamación o indignación a las naciones a las cuales está a punto de destruir (por ej., Isa. 51:17; Lam. 4:21; Jer. 25:15-16; 49:12; 51:7; Eze. 23:31-34; Job 21:20; Sal. 75:8). Las personas intoxicadas no pueden destruir, ni siquiera resistir, a los que los atacan; así que representarlos como intoxicados a manera de castigo es representarlos como dedicados a una destrucción irremediable. Chilton. Dias de Retribucion.

Nota: Chilton dice - Como vimos en el versículo 8, la palabra traducida como ira es realmente calor; los que desean la copa del "calor" de Babilonia recibirán una bebida más caliente que la que esperaban, la copa de la ira no diluida de Dios.
·         Los que fornican con la bestia serán atormentados con fuego y azufre en presencia de los santos ángeles y en la presencia del Cordero. Y el humo de su tormento sube por los siglos de los siglos.
·         La imagen de su condenación permanente está tomada de la completa destrucción de Sodoma y Gomorra por medio del fuego y el azufre, cuando "el humo de la tierra subía como el humo de un horno" (Gen. 19:28); su uso simbólico en Is. 34:9-10, que describe la caída de Edom). Chilton. Dias de Retribucion.

Ap. 14.12-13 (RVR95) Aquí está la perseverancia de los santos, los que guardan los mandamientos de Dios y la fe de Jesús. 13 Y oí una voz que me decía desde el cielo: «Escribe: “Bienaventurados de aquí en adelante los muertos que mueren en el Señor”. Sí, dice el Espíritu, descansarán de sus trabajos, porque sus obras con ellos siguen».
Ap. 14.12-13 (DHH) ¡Aquí se verá la fortaleza del pueblo santo, de aquellos que cumplen sus mandamientos y son fieles a Jesús! 13 Entonces oí una voz del cielo, que me decía: “Escribe esto: ‘Dichosos de aquí en adelante los que mueren unidos al Señor.’ ” “Sí—dice el Espíritu—, ellos descansarán de sus trabajos, pues sus obras los acompañan.”

Nota: Terry - Aquí está la paciencia de los santos — Comp. Ap. 13:10. Aquí hay oportunidad para el ejercicio y la exhibición de la santa paciencia. La negativa a adorar a la bestia y su imagen exigía la firmeza del mártir y una paciencia en la persecución que solo una verdadera observancia de los mandamientos de Dios y la fe en Jesús podían asegurar. Terry (1898). Apocalípticos bíblicos: (p. 408).

Nota: Chilton comenta que: Aquí está la paciencia de los santos.
·         La paciente confianza, esperanza, expectación, y fe del pueblo de Dios está en la justicia de su continuo gobierno sobre la tierra y la certeza de su juicio venidero (Ap. 13:10).
·         Los santos no deben preocuparse a causa de los malos, porque se marchitarán como la hierba; hemos de confiar en el Señor y hacer el bien, reposar en el Señor y esperarle pacientemente, y eventualmente heredaremos la tierra (Sal. 37). Chilton. Dias de Retribucion.

Nota:  Los malvados perseguidores serán destruídos, les dice Juan a sus lectores, y en breve; con Santiago, podemos decir:
 Por tanto, hermanos, tened paciencia hasta la venida del Señor. Mirad cómo el labrador espera el precioso fruto de la tierra, aguardando con paciencia hasta que reciba la lluvia temprana y la tardía. Tened también vosotros paciencia, y afirmad vuestros corazones; porque la venida del Señor se acerca. Hermanos, no os quejéis unos contra otros, para queno seáis condenados; he aquí, el juez está delante de la puerta (Santiago 5:7-9). Chilton. Días de Retribución.

Nota: Chilton dice que:  La perseverancia de los santos va necesariamente unida al hecho de que ellos guardan los mandamientos de Dios y la fe de Jesús. En oposición a todas las formas de adoración a la criatura, los cristianos guardan los mandamientos; guardan la fe. El Nuevo Testamento no conoce nada de un cristianismo sin ley, ni de una devoción que niegue el contenido objetivo de la "fe que una vez fue entregada a los santos" (Judas 3). El cristianismo exige perseverancia obediente y fiel en presencia de la oposición. Chilton. Días de Retribución.

Nota: Chilton - Los lectores de Juan sabían que guardar la fe podría muy bien significarles la muerte. Por ellos, Juan registra las siguientes palabras de la voz que se oye desde el cielo: Escribe: Bienaventurados los muertos que de aquí en adelante mueren en el Señor. Por medio de la obra de Cristo, el cielo se ha abierto para el pueblo de Dios. El limbus patrum, la morada en el más allá de los fieles del Antiguo Testamento (el "seno de Abraham" de Lucas 16:22), ha sida abierto, y sus habitantes liberados (comp. 1 Ped. 3:19; 4:6). La muerte es ahora la entrada a la comunión en gloria con Cristo y los santos que han partido. Chilton. Dias de Retribucion.

Ap. 14.14-16 (RVR95) Miré, y vi una nube blanca. Sentado sobre la nube, uno semejante al Hijo del hombre, que llevaba en la cabeza una corona de oro y en la mano una hoz aguda. 15 Y otro ángel salió del templo gritando a gran voz al que estaba sentado sobre la nube: «¡Mete tu hoz y siega, porque la hora de segar ha llegado, pues la mies de la tierra está madura!». 16 El que estaba sentado sobre la nube metió su hoz en la tierra y la tierra fue segada.
Ap. 14.14-16 (DHH) Miré, y vi una nube blanca, y sobre la nube estaba sentado alguien que parecía ser un hijo de hombre. Llevaba una corona de oro en la cabeza y una hoz afilada en la mano. 15 Y salió del templo otro ángel, gritando con fuerte voz al que estaba sentado en la nube: “¡Mete tu hoz y recoge la cosecha; porque ya llegó la hora, y la cosecha de la tierra está madura!” 16 El que estaba sentado en la nube pasó entonces su hoz sobre la tierra, y recogió la cosecha de la tierra.

Nota: Chilton dice que [Ap. 14:14-16]:  Estos versículos forman el centro de mesa de la sección entera, versículos Ap. 14:6-20.
·         Hemos visto tres ángeles que hacen proclamaciones a la tierra de Israel (Ap. 14:6-13); tres más aparecerán, para llevar a cabo acciones simbólicas sobre la tierra (Ap. 14:15, 17-20); y en el centro está una nube blanca, y sentado en la nube uno como Hijo del Hombre, teniendo una corona de oro sobre su cabeza.
·         Esta es la conocida Nube de Gloria, con la cual Cristo estaba vestido en Ap. 10:1; ahora es blanca, y no oscura como en Sinaí (Ex. 19:16-18; comp. Sof. 1:14-15). Chilton. Dias de Retribucion.


Nota: Chilton - El argumento de Juan es claro: Que las bestias hagan lo peor que puedan - el Hijo del Hombre ha ascendido en las nubes y recibido el dominio eterno sobre todos los pueblos y naciones. Su reino jamás será destruido; Él nunca tendrá sucesor.
·         Es claro también que ésta es una visión, no de alguna futura venida a la tierra, sino del resultado de la ascensión original de Cristo en las nubes al Padre - la Parusía definitiva.
·         El Hijo del Hombre reina ahora como el segundo Adán, el Rey de reyes.
·         Juan no muestra a Cristo viniendo en la nube, sino de hecho ya sentado en la nube, instalado en su trono celestial.
·         Anteriormente (v. 6), nos mostró a los oficiales israelitas sentados sobre la tierra; en frente de ellos se sienta el Señor Cristo, entronizado en la Nube de Gloria (comp. Sal. 2-2-6). Chilton. Dias de Retribucion.

Nota: Chilton comenta que: El Rey no sólo tiene una corona sobre la cabeza, sino también una hoz aguda en la mano.
·         Y salió otro ángel del templo, clamando a gran voz al que estaba sentado en la nube: Mete tu hoz y siega, porque la hora de segar ha llegado, pues la mies de la tierra está madura.
·         El primer ángel de esta tríada repite lo que ha dicho el primer ángel de la otra tríada (v. 7): ¡La hora ha llegado!
·         Sin embargo, esta vez el énfasis cae, no sobre juicio sino sobre bendición, la reunión de los elegidos.
·         Esto también está conectado con la obra del Hijo del Hombre en su Parusía, cuando envía a sus "ángeles", sus mensajeros apostólicos, para reunir a los elegidos (Mat. 24:30-31).
·         Jesús describió el reino de Dios como una gran cosecha (Mar. 4:26-29), y les dijo a sus discípulos: "He aquí os digo: Alzad vuestros ojos y mirad los campos, porque ya están blancos para la siega. Y el que siega recibe salario, y recoge fruto [comp. Ap. 14:13], y recoge fruto [comp. Ap. 14:4] para vida eterna; para que el que siembra goce juntamente con el que siega" (Juan 4:35-36). Chilton. Dias de Retribucion.

Nota: Chilton continua: En consecuencia, el primer ángel (que representa a sus contrapartes terrenales) llama al Hijo del Hombre para que meta su hoz (mencionada siete veces en este pasaje) y siegue, orando en obediencia al mandamiento de Cristo: "La mies es mucha, mas los obreros pocos. Rogad, pues, al señor de la mies, que envíe obreros a su mies" (Mat. 9:37-38). Desde este trono-nube, el rey contesta la oración de la Iglesia: Metiendo su hoz en la tierra, Él envía obreros; la tierra es segada, y el fruto es traído a su reino. En la Escritura, la imagen de la hoz está conectada con el pentecostés, celebrado después de que el grano había sido cosechado (Deut. 16:9), cuando el Espíritu es derramado en salvación y bendición (Hechos 2). Chilton. Dias de Retribucion.

Ap. 14.17 (RVR95) Otro ángel salió del templo que está en el cielo, llevando también una hoz aguda. Ap. 14.18 (RVR95) Y salió del altar otro ángel, que tenía poder sobre el fuego, y llamó a gran voz al que llevaba la hoz aguda, diciendo: «¡Mete tu hoz aguda y vendimia los racimos de la tierra, porque sus uvas están maduras!».
Ap. 14.17 (DHH) Luego otro ángel salió del templo que está en el cielo, llevando él también una hoz afilada. Ap. 14.18 (DHH) Y del altar salió otro ángel, que tenía autoridad sobre el fuego y que llamó con fuerte voz al que llevaba la hoz afilada, diciendo: “¡Mete tu hoz afilada, y corta con ella los racimos de los viñedos que hay en la tierra, porque ya sus uvas están maduras!”

Nota: Chilton muestra un punto muy importante sobre estos versículos: Juan regresa al tema del juicio, porque el concomitante de la reunión de la Iglesia es la excomunión de Israel.
·         Génesis 21 registra cómo el reconocimiento de Isaac y el hijo de la promesa requirió la expulsión de Agar y de su hijo, Ismael; y Pablo vio en esta historia una alegoría del rechazo del antiguo Israel y el reconocimiento de la Iglesia como el "heredero de la promesa".
·         Pablo se los explicó a las iglesias de Galacia, que habían sido infiltradas por las enseñanzas del judaísmo:
 "Está escrito que Abraham tuvo dos hijos; uno de la esclava, el otro de la libre. Pero el de la esclava nació según la carne; mas el de la libre, por la promesa. Lo cual es una alegoría, pues estas mujeres son los dos pactos; el uno proviene del monte Sinaí, el cual da hijos para esclavitud; éste es Agar. Porque Agar es el monte Sinaí en Arabia, y corresponde a la Jerusalén actual, pues ésta, junto con sus hijos, está en esclavitud. Mas la Jerusalén de arriba, la cual es madre de todos nosotros, es libre. ... Así que, hermanos, nosotros, como Isaac, somos hijos de la promesa. Pero como entonces el que había nacido según la carne perseguía al que había nacido según el Espíritu, así también ahora. Más, ¿qué dice la Escritura? Echa fuera a la esclava y a su hijo, porque no heredará el hijo de la esclava con el hijo de la libre. De manera, hermanos, que no somos hijos de la esclava, sino de la libre" (Gal. 4:22-31).
·         La antigua Jerusalén, la ciudad capital del judaísmo apóstata y perseguidor, fue echada fuera, excomulgada del Pacto, al mismo tiempo que la Iglesia estaba siendo reconocida como la legítima heredera de la promesa.
·         Los cristianos, nacidos del Espíritu, son los verdaderos hijos de la Jerusalén celestial. Chilton. Dias de Retribucion.

Nota: Chilton - Por lo tanto, un segundo ángel sale del templo que está en el cielo para ayudar en la mies con su hoz aguda.
·         Cristo enseñó a orar a sus discípulos, no sólo por la conversión de Israel, sino también por su destrucción; es por eso que en Ap. 6:9-11 vimos a los santos reunidos alrededor del altar de oro de incienso, ofreciendo sus oraciones imprecatorias pidiendo venganza.

·         Poco después de esa escena, al comienzo de las visiones de las trompetas, un ángel tomó el incensario con las oraciones de los santos, lleno con fuego del altar, y lo lanzó a la tierra; "y hubo truenos, y voces, y relámpagos, y un terremoto" (Ap. 8:3-5).
Ahora, al término de la sección de las trompetas, Juan ve al mismo ángel, el que tiene poder, no sólo "sobre fuego", como dice la mayoría de las traducciones, sino sobre el fuego, el fuego que arde en el altar; y este ángel viene específicamente del altar de las oraciones de los santos para hacer juicio, para producir la respuesta histórica al culto y a las oraciones de la Iglesia. Él también ora por la vendimia - pero esta vez será la vendimia de los impíos, las "uvas de la ira".
·         Así, este tercer ángel llama al segundo ángel, el que tiene la hoz, y le dice: Mete tu hoz aguda, y reúne los racimos de la viña de la tierra, porque sus uvas están maduras. La viña de Dios, Israel, está madura para el juicio.

o   Tenía mi amado una viña en una ladera fértil. La había cercado y despedregado y plantado de vides escogidas; había edificado en medio de ella una torre, y hecho también en ella un lagar; y esperaba que diese uvas, y dio uvas silvestres. Ahora, pues, vecinos de Jerusalén y varones de Judá, juzgad ahora entre mí y mi viña. ¿Qué más se podía hacer a mi viña, que yo no haya hecho en ella? ¿Cómo, esperando yo que diese uvas, ha dado uvas silvestres? Os mostraré, pues, ahora lo que haré yo a mi viña: Le quitaré su vallado, y será consumida; aportillaré su cerca, y será hollada. Haré que quede desierta; no será podada ni cavada, y crecerán el cardo y los espinos; y aun a las nubes mandaré que no derramen lluvia sobre ella. Ciertamente la viña de Jehová de los ejércitos es la casa de Israel, y los hombres de Judá planta deliciosa suya. Esperaba juicio, y he aquí vileza; justicia, y he aquí clamor. (Is. 5:1-7) Chilton. Días de Retribución.

Ap. 14.19-20 (RVR95) El ángel metió su hoz en la tierra, vendimió la viña de la tierra y echó las uvas en el gran lagar de la ira de Dios. 20 El lagar fue pisado fuera de la ciudad, y del lagar salió sangre que llegó hasta los frenos de los caballos en una extensión de mil seiscientos estadios.
Ap. 14.19-20 (DHH) El ángel pasó su hoz sobre la tierra y cortó las uvas de los viñedos de la tierra, y luego las echó en el gran recipiente que se usa para exprimirlas y que simboliza la ira de Dios. 20 Las uvas fueron exprimidas fuera de la ciudad, y del recipiente salió sangre, que llegó a la altura de los frenos de los caballos en una extensión de trescientos kilómetros.

Nota: Chilton - El viñedo es juzgado: el ángel arrojó su hoz a la tierra, y recogió "la vid de la tierra", y la arrojó a la gran prensa de vino de la ira de Dios para producir la sustancia que se derramará de los cálices en el capítulo 16.
·         Las referencias repetidas a la Tierra (Ap. 14:15-19), combinadas con las imágenes de la enredadera de la Tierra, enfatizan que este es un juicio sobre la Tierra de Israel.
·         Al revisar el extenso trasfondo bíblico de la idea del viñedo,
·         Carrington concluye:  "No parece posible suponer que San Juan podría haber tenido la intención de aplicar estas palabras a ningún otro país que no sea Israel, o cualquier otra ciudad que no sea Jerusalén. Se hacen eco de la palabras de San Juan Bautista, con las cuales comenzó todo el movimiento profético cristiano, incluso ahora se ha puesto el hacha a la raíz del árbol. Lo que es contingente en el Bautista es absoluto en Apocalipsis. Israel es rechazado ". Carrington, pág. 256. Sobre el uso que hace Cristo de las imágenes de la viña en sus parábolas, véase Chilton, Paradise Restored, págs. 76-82 .Chilton Días de venganza.

Nota: Chilton - Las imágenes de este pasaje están basadas en la profecía de Isaías sobre la destrucción de Edom, donde Dios es descrito como un hombre que exprime las uvas en un lagar. Él explica por qué su túnica está manchada con "jugo":
He pisado yo solo el lagar, y de los pueblos nadie había conmigo; los pisé con mi ira, y los hollé con mi furor; y su sangre salpicó mis vestidos, y manché todas mis ropas. Porque el día de la venganza está en mi corazón, y el año de mis redimidos ha llegado. Miré, y no había quién ayudara, y me maravillé que no hubiera quien sustentase; y me salvó mi brazo, y me sostuvo mi ira. Y con mi ira hollé los pueblos, y los embriagué en mi furor, y derramé en tierra su sangre. (Isa. 63:3-6).

Nota: Chilton - Y fue pisado el lagar fuera de la ciudad, y del lagar salió sangre, hasta los frenos de los caballos, por mil seiscientos estadios.
Es desafortunado que traducciones como NASV [DHH], debido a presuposiciones literalistas, presentan esta medida como una medida moderna: doscientas millas [300 Kilómetros].
·         Aunque esa traducción sí proporciona una buena idea de la magnitud del derramamiento de sangre, pasa por alto completamente la importante figura simbólica de mil seiscientos, un número que nuevamente subraya la tierra: cuatro al cuadrado (la tierra), multiplicado por diez al cuadrado (dimensiones).
·         Mil seiscientos estadios es ligeramente mayor que la longitud de Palestina: La tierra entera de Israel está así representada como desbordante de sangre en el venidero juicio nacional: Los ríos de sangre que fluyen se convierten en un gran Mar Rojo, llegando hasta los frenos de los caballos en una recapitulación del derribamiento de los caballos y los carruajes de Faraón (Ex. 14:23, 28; 15:19; comp. el extenso uso de imágenes del Éxodo en el siguiente capítulo).

·         Zacarías había predicho un día en que todas las cosas por toda la tierra serían santas, cuando la tierra sería llena de adoradores puros, cuando SANTO A JEHOVÁ estaría inscrito hasta en "las campanillas de los caballos" de Israel (Zac. 14:20-21).

·         Pero Dios había levantado en el monte de Sión un Israel nuevo y puro, en el cual se cumplirían las promesas. El antiguo Israel se había convertido en apóstata e inmundo, nadando en sangre sus caballos. Chilton. Días de Retribución.


Nota: Chilton dice que “El derramamiento de sangre cubre la tierra, pero está fuera de la ciudad.
·         El cumplimiento histórico de esto fue, desde un punto de vista, cuando "Galilea rebosaba de fuego y sangre", cuando las tropas de Vespasiano y de Tito invadieron el país. La tierra entera, excepto Jerusalén, fue cubierta de muerte y devastación.

·         Sin embargo, teológicamente, el cumplimiento de este texto hay que relacionarlo también con el sacrificio de Cristo, porque ese fue el definitivo derramamiento de sangre "fuera de la ciudad".
·         En el sistema sacrificial del Antiguo Testamento, "los cuerpos de los animales cuya sangre era traída al Lugar Santo por el sumo sacerdote como ofrenda por el pecado, eran quemados fuera del campamento. Por lo tanto, Jesús también, para que pudiera santificar al pueblo por medio de su propia sangre, sufrió fuera de la puerta. De aquí que vayamos a Él fuera del campamento, llevando su reproche. Porque aquí no tenemos una ciudad duradera, sino que buscamos la ciudad que ha de venir" (Heb. 13:11-14).

·          Por lo tanto, fuera de la ciudad era el lugar de juicio, donde se disponía de los cuerpos de los animales sacrificados; y era el lugar de juicio, donde la sangre de Cristo fue derramada por el Israel rebelde.
·         En estas imágenes por capas, entonces, la sangre que fluye fuera de la ciudad pertenece a Cristo, sacrificado fuera del campamento; y ha de ser la sangre del Israel apóstata también, echado fuera y excomulgado de "la Jerusalén de arriba" y desheredado por el Padre.

·         He aquí la doctrina de la expiación limitada, y con creces: ¡Fluirá la sangre - si la sangre no es la de Cristo, derramada en nuestro nombre, será la nuestra!
·         "En el año 70 d. C., la viña de Israel fue cortada y pisoteada en el lagar; pero esta destrucción es la culminación de un proceso que había durado más de cuarenta años; comenzó fuera de la ciudad, cuando Uno al cual despreciaron y rechazaron pisó el lagar solo, y del pueblo no hubo nadie con Él. 

Fue en ese momento cuando Jerusalén cayó". Chilton. Días de Retribución.

Fin de Estudio: Ap. 14:1-20- Los Elegidos y La Gran Babilonia