viernes, 20 de marzo de 2020

Estudio: Ap. 18:1-24 – HA CAÍDO BABILONIA


Punto de vista: PRETERISTA

Nota: Continuación de la profecía de la destrucción de Jerusalén (Babilonia).

Nota: David Chilton, Milton Terry, J. Stuart Russell y Philip Carrington, creen que los capítulos restantes (Ap. 12-19) continúan la profecía de la destrucción de Jerusalén (identificando a Babilonia también con Jerusalén). Chilton afirma que "la segunda mitad del Libro de Ap. cubre casi el mismo terreno que la primera, pero desde una perspectiva diferente". Gregg, S. (1997). Ap. cuatro puntos de vista: un comentario paralelo (págs. 252–254).

Ap. 18.1 (RVR95) Después de esto vi otro ángel que descendía del cielo con gran poder, y la tierra fue alumbrada con su gloria.
Ap. 18.1 (DHH) Después de esto, vi otro ángel que bajaba del cielo; tenía mucha autoridad, y la tierra quedó iluminada con su resplandor.

Nota: Chilton -Ap. 18:1 Ahora Juan es presentado a otro ángel - probablemente el Señor Jesucristo, considerando la descripción de Él, comparada con afirmaciones sobre Cristo en el evangelio de Juan:
·         Baja del cielo (Juan 3:13, 31; 6:38, 58),
·         tiene gran autoridad (Juan 5:27; 10:18; 17:2), y que
·         la tierra fue iluminada con su gloria (Juan 1:4-5, 9, 14; 8:12; 9:5; 11:9; 12:46; comp. 1 Tim. 6:16).

Las expresiones son paralelas con las de Ap. 10:1, que, como hemos visto, claramente hablan del Hijo de Dios.
La última frase es virtualmente una repetición de Ezequiel 43:2, donde dice de Dios que "la tierra resplandecía a causa de su gloria".

Cristo mismo, que trae la ira de Dios sobre la ciudad-ramera, viene a proclamar el juicio de ella. La destrucción de los apóstatas del pacto manifiesta la autoridad de Dios y su gloria en la tierra. Chilton. (p. 445-446). Días de Retribución.

Ap. 18.2 (RVR95) Clamó con voz potente, diciendo: «¡Ha caído, ha caído la gran Babilonia! Se ha convertido en habitación de demonios, en guarida de todo espíritu inmundo y en albergue de toda ave inmunda y aborrecible,
Ap. 18.2 (DHH) Con fuerte voz gritaba: “¡Ya cayó, ya cayó la gran Babilonia! ¡Se ha vuelto vivienda de demonios, guarida de toda clase de espíritus impuros, nido de toda clase de aves impuras y de fieras impuras y odiosas!

Nota: Simular de Ap. 14.8
Ap. 14.8 (NBLH) Lo siguió otro ángel, el segundo, diciendo: “¡Cayó, cayó la gran Babilonia!, la que ha hecho beber a todas las naciones del vino de la pasión (del furor) de su inmoralidad.”

Nota: Gregg - Se sabe que el hecho de que Babilonia se haya convertido en una habitación de todo espíritu inmundo y de cada ave inmunda y odiosa (v. 2) es cierto de Jerusalén, que fue invadida por demonios, como predijo Cristo (Mat. 12: 38–45), y que, siendo reducido al nivel del suelo, nuevamente como lo predijo Cristo (Mat. 24:2), se convirtió en la guarida de las criaturas del desierto consideradas inmundas en la religión de los judíos.  Gregg, S. (1997). Revelación, cuatro puntos de vista: un comentario paralelo (p. 424).

Nota: Terry

Caído, caído, es Babilonia. Ya en Ap. 14:8, se ha emitido esta palabra de fatalidad, y ahora se repite con mayor asombro. El idioma es de Is. 21:9 y Jer. 51:7-8.
·         
Demonios ... espíritu ... pájaro: las imágenes se pueden rastrear hasta Is. 13:21; Jer. 9:11; 50:39; 51:37, e indica una escena de absoluta desolación.
·         Cómo Jerusalén se infestó con exhibiciones demoníacas de maldad, incluso antes de su caída, se ha mostrado en notas sobre el infortunio de la quinta trompeta (Ap. 9:1-11). Terry, M. S. (1898). Apocalipsis bíblicos: un estudio de las revelaciones más notables de Dios y de Cristo en las Escrituras canónicas (p. 437).

Nota: Chilton - Ap. 18:2 La proclamación del mensajero de Dios es consistente (Ap. 14:8): Ha caído, ha caído Babilonia la grande. Su destino es seguro, y por eso de él se habla como ya completado.
·         Esto es similar a la endecha que Amós cantó contra Israel:
Cayó la virgen de Israel, y no podrá levantarse ya más; fue dejada sobre su tierra, no hay quien la levante. (Amós 5:2).
·         La apostasía de Jerusalén se ha vuelto tan grande que su juicio es permanente e irrevocable.
·         Ella es Babilonia, la implacable enemiga de Dios, habiéndose convertido en habitación de demonios y guarida de todo espíritu inmundo, y albergue de toda ave inmunda y aborrecible, en contraste con la Nueva Jerusalén de Ap. 21:27 ("no entrará en ella ninguna cosa inmunda").
·         La ramera está en un desierto (Ap. 17:3), habiendo sido dejada desolada por sus pecados (Ap. 17:16; Mat. 24:15). …  el desierto es el lugar de pecado y de los demonios (Mat. 12:43).
·        
Isaías había profetizado sobre la desolación de Babilonia:
Dormirán allí las fieras del desierto, y sus casas se llenarán de hurones; allí habitarán avestruces, y allí saltarán las cabras salvajes. (Is. 13:21)
·         Ahora el decreto del ángel aplica las antiguas maldiciones a los rebeldes judíos del siglo primero.
o   Porque Israel rechazó a Cristo, la nación entera es poseída por demonios, por completo más allá de toda esperanza de reforma (Mat. 12:38-45; Ap. 9:1-11).
o   Jerusalén, que había sido la morada de Dios, ahora se ha convertido en morada inmunda de demonios. Chilton. (p. 446). Dias de Retribucion.

Ap. 18.3 (RVR95) porque todas las naciones han bebido del vino del furor de su fornicación. Los reyes de la tierra han fornicado con ella y los mercaderes de la tierra se han enriquecido con el poder de sus lujos sensuales».
Ap. 18.3 (DHH) Pues todas las naciones se emborracharon con el vino de su prostitución; los reyes del mundo se prostituyeron con ella, y los comerciantes del mundo se hicieron ricos con su exagerado derroche.”

Nota: Gregg - Jerusalén fue acusada de cometer fornicación con los reyes de la tierra (v. 3) en los tiempos del Antiguo Testamento (Ezequiel 16:14-15, 26, 28-30; 23:12-21).
·         El profeta usó estas imágenes para explicar la razón de Dios para juzgar a Jerusalén por manos de los babilonios en 586 a. C.
·         Parecería apropiado que el apóstol / profeta del Nuevo Testamento empleara el mismo lenguaje para describir un evento casi idéntico, la destrucción de Jerusalén por los romanos. Gregg, S. (1997). Apocalipsis, cuatro puntos de vista: un comentario paralelo (págs. 424–425).

Nota: Chilton - Ap. 18:3 El abandono de Israel y la perversión de su llamado como maestro-sacerdote para las naciones se menciona nuevamente como la razón de su destrucción (Ap. 14:8; 17:2, 4).
·         Ha fornicado con las naciones, con los reyes, y con los mercaderes, prostituyendo sus dones en vez de guiar a las naciones hacia el reino, uniéndose a ellas en el intento de derribar al Rey.
·         El énfasis sobre los mercaderes más probablemente está relacionado con las actividades comerciales alrededor del templo.
·         La corrupción del comercio en el templo afectó la liturgia de la nación.
·         Toda vida fluye del centro religioso de la cultura; si el núcleo está podrido, la fruta no vale nada.
·         Fue por esto por lo que Jesús entró en conflicto con los cambistas del templo (Mat. 21:12-13; Juan 2:13-22).
o   Observando que muchos de los negocios pertenecían a la familia del sumo sacerdote, Ford cita la caracterización que hace Josefo del sumo sacerdote Ananías como "el gran procurador del dinero". En particular, "la corte de los gentiles parece haber sido escenario de un floreciente comercio en sacrificios de animales, posiblemente apoyado por la familia del sumo sacerdote".
·         Esto concordaría con la observación ya hecha, de que Babilonia no es ninguna prostituta ordinaria: Su castigo por medio del fuego indica que ella es de la clase sacerdotal. Chilton. (p. 448). Dias de Retribucion.

Ap. 18.4-5 (RVR95) Y oí otra voz del cielo, que decía: «¡Salid de ella, pueblo mío, para que no seáis partícipes de sus pecados ni recibáis parte de sus plagas!, 5 porque sus pecados han llegado hasta el cielo y Dios se ha acordado de sus maldades.
Ap. 18.4-5 (DHH) Oí otra voz del cielo, que decía: “Salgan de esa ciudad, ustedes que son mi pueblo, para que no participen en sus pecados ni los alcancen sus calamidades; 5 pues sus pecados se han amontonado hasta el cielo, y Dios ha tenido presentes sus maldades.

Nota: Gregg -Algunas características en estos versículos encajan bien con la suposición de que Babilonia es Jerusalén justo antes del año 70 DC.
·         El llamado a salir de ella, mi pueblo (v. 4) no solo hace eco de exhortaciones similares sobre la antigua Babilonia (cf. Is. 48:20; Jer. 50:8; 51:6), pero también las instrucciones de Cristo a los discípulos de huir de la ciudad condenada a la primera señal de su inminente destino (véase Lucas 21:20–23).
·         La epístola a los hebreos en su conjunto (y especialmente a pasajes como Heb. 12:25–29; 13:13–14) constituye un llamado como el que se encuentra aquí. Gregg, S. (1997). Revelación, cuatro puntos de vista: un comentario paralelo (p. 428).

Nota: Terry
·         Vengan, mi pueblo — Comp. Is. 48:20; 52:11; Jer. 1:8; 51:6, 9, 45. Había algo análogo a esto en el mandato de Cristo de que los discípulos huyeran de Jerusalén cuando vieran las señales de su ruina inminente (Mateo 24:16).
·         Sus pecados han llegado hasta el cielo. Así, en esencia, Jeremías dijo de Babilonia (Jer. 51: 9). Terry (1898). Apocalipsis bíblicos: un estudio (p. 437).

Nota: Chilton - Ap. 18:4-5 Puesto que Israel debía ser destruido, los apóstoles pasaron gran parte de su tiempo durante los últimos días llamando al pueblo a separarse de él, urgiéndoles a que, en su lugar, se unieran a la Iglesia (Hechos 2:37-40; 3:19-26; 4:8-12; 5:27-32).
·         Este es el mensaje de Juan en Apocalipsis.
o   El pueblo de Dios no debe buscar reformar a Israel, con su nueva religión del judaísmo, sino que debe abandonarle a su suerte.
o   Los judíos habían "probado la buena palabra de Dios y los poderes del siglo venidero" - la era introducida por el acto redentor de Cristo - y habían apostatado.
o    Sería "imposible renovarlos para arrepentimiento".
o   El judaísmo - el vano intento de continuar el Antiguo Pacto mientras se rechaza a Cristo "está reprobado, próximo a ser maldecido, y su fin es el ser quemado" (Heb. 6:4-8).
o    La religión del Antiguo Pacto no puede ser revivida; es imposible tener el Pacto sin Cristo.
o   No puede haber "regreso" a algo que nunca existió, pues aun los padres bajo el Antiguo Pacto adoraron a Cristo bajo las señales y los sellos de la era provisional (1 Cor. 10:1-4).
o   Ahora que "el siglo venidero" ha llegado, la salvación es con Cristo y la Iglesia. Sólo la destrucción espera a los que están identificados con la ramera: Salid de ella, pueblo mío, para que no seáis partícipes de sus pecados y no recibáis de sus plagas (Heb. 10:19-39; 12:15-29; 13:10-14).
o   El tiempo para el arrepentimiento de Israel se ha acabado, y sus pecados se han acumulado hasta el cielo (Gen. 19:13; 2 Cron. 28:9; Esdras 9:6; Jer. 51:9; Jonás 1:2).
o   Jesús había predicho que esta generación crucificadora "colmaría la medida de la culpa" de sus rebeldes padres, y que por eso sobre ellos caería "toda la sangre justa que se ha derramado sobre la tierra" (Mat. 23:32-35).
o   Esta profecía se cumplió dentro del primer siglo, como observó Pablo: "Ellos no agradan a Dios, y se oponen a todos los hombres, impidiéndonos hablar a los gentiles para que éstos se salven; así colman ellos siempre la medida de sus pecados, pues vino sobre ellos la ira hasta el extremo" (1 Tes. 2:15-16).

Nota: Chilton - Por lo tanto, se exigía, no sólo separación religiosa - para que no participéis de sus pecados - sino que era necesaria también la separación física, geográfica (Mat. 24:16-21), para que no recibáis de sus plagas.
·         El lenguaje recuerda el llamado de Dios a su pueblo a salir de Babilonia al final del cautiverio.
·         Los textos del Antiguo Testamento hablan en términos de tres ideas:
1.      la venidera destrucción de Babilonia,
2.       la venidera redención del fiel pueblo del pacto, y
3.      la reconstrucción del templo (Esdras 1:2-3; Isa. 48:20; 52:11-12; Jer. 50:8; 51:6, 9, 45).
·         De manera similar, el pueblo del Nuevo Pacto habría de separarse de Israel.
1.      Los perseguidores estaban a punto de sufrir destrucción a manos de Dios,
2.      la redención de la Iglesia se acercaba (Lucas 21:28, 31), y
3.      el Nuevo Templo estaba a punto de ser establecido plenamente.  Chilton. (p. 449). Dias de Retribucion.

Ap. 18.6-8 (RVR95) Dadle a ella tal como ella os ha dado y pagadle el doble según sus obras. En el cáliz en que ella preparó bebida, preparadle el doble a ella. 7 Cuanto ella se ha glorificado y ha vivido en deleites, tanto dadle de tormento y llanto, porque dice en su corazón: “Yo estoy sentada como una reina, no soy viuda y no veré llanto”». 8 Por lo cual, en un solo día vendrán sus plagas: muerte, llanto y hambre, y será quemada con fuego, porque poderoso es Dios el Señor, que la juzga.
Ap. 18.6-8 (DHH) Denle lo mismo que ella ha dado a otros; páguenle el doble de lo que ha hecho; mézclenle una bebida dos veces más fuerte que la que ella mezcló para otros; 7 denle tormento y sufrimiento en la medida en que se entregó al orgullo y al derroche. Pues dice en su corazón: ‘Aquí estoy sentada como una reina. No soy viuda, ni sufriré.’ 8 Por eso, en un solo día le vendrán sus calamidades: muerte, aflicción y hambre, y será quemada en el fuego; porque poderoso es Dios, el Señor, que la ha condenado.”

Nota: Chilton - Ap. 18:6-8 El justo Juez exige restitución: Dadle a ella como ella os ha dado, y pagadle doble según sus obras; en el cáliz en que ella preparó bebida, preparadle a ella el doble (Jer. 50:15, 29; Sal. 137:8; Is. 40:2).
·         Esta orden fue dada, o a los ángeles del cielo, o a los ejércitos romanos que son agentes de la ira de Dios.

·         La expresión traducida aquí como “pagarle el doble” tiene en realidad una duplicación hebraica del término, proporcionando  un "doble testimonio", para fines de énfasis: Doble para sus cosas dobles. Esta es la restitución ordinaria requerida por la ley bíblica (Ex. 22:4, 7).

·         Por esto, hasta el punto en que ella se glorificó a sí misma y vivió sensualmente, hasta ese mismo punto dadle tormento y luto. En la Biblia, una restitución doble no es más de lo que el criminal merece.

·         Es exactamente lo que merece - una contabilidad estricta y proporcional de ira según el principio de “ la lex talionis” de equivalencia de Dios: "vida por vida, ojo po ojo, diente por diente, mano por mano, pie por pie, quemadura por quemadura, herida por herida, golpe por golpe" (Ex. 21:23-25). Chilton. (p. 450). Dias de Retribucion.

Nota: Chilton Ap. 18:7 - Este castigo llega a la Ramera porque ella dice en su corazón:
Yo estoy sentada como reina, y no soy viuda, y no veré llanto - en paralelo con el alarde de la iglesia laodicense: "Yo soy rico, y me he enriquecido, y de ninguna cosa tengo necesidad" (Ap. 3:17).
El texto está basado en la condena de Babilonia por parte de Dios en Is. 47:6-11, un pronunciamiento del juicio que vendría sobre ella por maltratar al pueblo del pacto. Chilton. (p. 450). Dias de Retribucion.


Nota: Gentry – Juan utiliza las imágenes de la viuda de Jeremiah de Lamentations en su descripción de La Ramera:
Y pasarán muchas naciones por esta ciudad; y se dirán unos a otros: "¿Por qué ha hecho el Señor así a esta gran ciudad?" (Jer 22:8)
Qué solitaria se sienta la ciudad ¡Eso estaba lleno de gente! Se ha convertido en una viuda ¡Quién fue una vez grande entre las naciones! La que era princesa entre las provincias. Se ha convertido en un trabajador forzado! (Lam. 1:1)
Gentry, K. L., Jr. (2010). El libro de Apocalipsis es más fácil: puedes entender la profecía bíblica (p. 76).

Nota: Terry Ap. 18:8. En un día, es decir, de repente!
·         Entonces en Isa. 47:9: "Estas dos cosas vendrán a ti en un momento en un día, la pérdida de hijos y la viudez: vendrán sobre ti en su perfección por la multitud de tus hechicerías, la gran abundancia de tus encantamientos". Terry (1898). Apocalipsis bíblicos: un estudio (p. 437).

Nota: Chilton Ap. 18:8 -  Por lo cual en un día vendrán sus plagas; muerte, llanto y hambre, y será quemada con fuego; porque poderoso es Dios el Señor, que la juzga.
·         El día del Señor vendría sobre Israel en juicio ardiente, trayendo destrucción repentina (1 Tes. 5:2-3).
·         Aquí, el término día significa … para indicar relativa rapidez, y para subrayar que la destrucción de Jerusalén no sería un suceso al azar: vendría como el día del juicio.
·         Como hija del sacerdote que se volvió ramera, sería quemada con fuego (Lev. 21:9).
·         Después de que llegó aquel día terrible, "no quedó nada para hacer creer a los que iban allí ni siquiera de que había estado habitada" (Josefo, Guerra, vii.i.i). Chilton. (n.d.). Dias de Retribucion.

Reacciones a la caída de Babilonia (Ap. 18:9-20)
Ap. 18.9-10 (RVR95) Los reyes de la tierra que han fornicado con ella y con ella han vivido en deleites, llorarán y harán lamentación sobre ella cuando vean el humo de su incendio. 10 Poniéndose lejos por el temor de su tormento, dirán: «¡Ay, ay de la gran ciudad, de Babilonia, la ciudad fuerte!, porque en una sola hora vino tu juicio».
Ap. 18.9-10 (DHH) Los reyes del mundo que se prostituyeron con ella y se entregaron al derroche, llorarán y harán lamentación por ella cuando vean el humo de su incendio. 10 Se quedarán lejos por miedo a su castigo, y dirán: “¡Ay, ay de ti, la gran ciudad, Babilonia, la ciudad poderosa! Porque en un instante llegó tu castigo.”

Nota: Gregg - Esta larga sección (Ap. 18:9-20) presenta estas características principales:
     (a) que Babilonia cae repentinamente, ¡en una hora! (Ap. 18:10, 17, 19);
     (b) que la caída de Babilonia será permanente e irrevocable (Ap. 18:11, 14, 21, 22, 23);
     (c) que Babilonia había estado asociada con una abundancia de productos de lujo (Ap. 18:11-17);
     (d) que la caída será la ocasión de grandes lamentos para los reyes de la tierra (Ap. 18:9), para los mercaderes de la tierra (Ap. 18:11, 15), y para cada capitán de barco ... marineros, y tantos como el comercio en el mar (Ap. 18:17);
     (e) que el mismo evento será una ocasión de regocijo y vindicación para los santos apóstoles y profetas (Ap. 18:20) y los profetas y santos (Ap. 18:24).  Gregg, S. (1997). Apocalipsis, cuatro puntos de vista: un comentario paralelo (p. 432).


Nota: Chilton - Ap. 18:9-10 Tres clases de personas se lamentan de la destrucción de Jerusalén.
·         El primer grupo comprende a los reyes de la tierra, las naciones del imperio que ayudó y fue cómplice del infiel pueblo del pacto en su apostasía contra Dios.
·         La destrucción de la ramera es para ellos una señal terrible del riguroso e inexorable juicio de Dios.
·         Ven el humo de su incendio - un símbolo que ha sido tomado de la destrucción de Sodoma (Gen. 19:28) y la posterior destrucción metafórica de la caída de Edom (Isa. 34:10) - y se les recuerda que un juicio similar contra ellos no puede tardar.
·         Dios declaró al profeta Jeremías que las naciones de la tierra serían obligadas a beber de la copa de su ira ardiente:
o   "Y si no quieren tomar la copa de tu mano para beber, les dirás tú: Así ha dicho Jehová de los ejércitos: Tenéis que beber. Porque he aquí que a la ciudad en la cual es invocado mi nombre yo comienzo a hacer mal; ¿y vosotros seréis absueltos? No seréis absueltos; porque espada traigo sobre todos los moradores de la tierra, dice Jehová de los ejércitos" (Jer. 25:28-29). Chilton. (p. 453). Días de Retribución.

Ap. 18.11-13 (RVR95) Los mercaderes de la tierra lloran y hacen lamentación sobre ella, porque ninguno compra más sus mercaderías: 12 mercadería de oro y plata; de piedras preciosas y perlas; de lino fino, púrpura, seda y escarlata; de toda madera olorosa, todo objeto de marfil y todo objeto de madera preciosa; de cobre, hierro y mármol; 13 canela y especias aromáticas; incienso, mirra y olíbano; vino y aceite; flor de harina y trigo; bestias y ovejas; caballos y carros; esclavos y almas de hombres.
Ap. 18.11-13 (DHH) Los comerciantes del mundo también llorarán y harán lamentación por esa ciudad, porque ya no habrá quien les compre sus cargamentos: 12 cargamentos de oro, plata, piedras preciosas, perlas, telas de lino fino y de seda, de color púrpura y rojo; toda clase de maderas aromáticas; objetos de marfil, de maderas preciosas, de bronce, de hierro y de mármol; 13 cargamentos de canela y especias aromáticas; incienso, perfumes y resinas; vino, aceite, harina fina y trigo; animales de carga, ovejas, caballos, carros y hasta esclavos, que son vidas humanas.

Nota: Chilton Ap. 18:11-13 El segundo y mayor grupo de plañideros consiste de los mercaderes de la tierra, llorando porque nadie compra más sus mercaderías.
o   La riqueza de Jerusalén era resultado directo de las bendiciones prometidas en Levítico 26 y Deuteronomio 28.
o   Dios la había hecho un gran centro comercial, pero ella había abusado del don.
o   Aunque hay similitudes entre la lista de mercaderías aquí y las de Ezequiel 27:12-24 (una profecía contra Tiro), es probable que los artículos reflejan principalmente el templo y el comercio que lo rodeaba.
o    Ford observa que "el comercio exterior tenía gran influencia sobre la ciudad santa, y al templo le tocaba la mayor parte. Los artículos principales eran productos alimenticios, metales preciosos, artículos de lujo, y materiales de vestir".  Chilton. (p. 454). Dias de Retribucion.

Nota: Josefo - Josefo también registra el hecho de que uno de los sacerdotes, llamado Jesús, entregó a Tito los tesoros del templo:
"Salió, y entregó, de sobre el muro del santuario, dos candelabros parecidos a los que estaban depositados en el santuario, así como mesas, fuentes, platos, todos de oro sólido y muy pesados. También entregó las cortinas, las vestimentas de los sumos sacerdotes, cuajadas de piedras preciosas, y una multitud de otros objetos requeridos para el servicio en el templo. Además, el tesorero del templo, de nombre Fineas, cuando fue tomado prisionero, reveló dónde estaban las túnicas y los cinturones de los sacerdotes, una gran provisión de púrpura y escarlata que se guardaban para reparar la cortina del templo, junto con una gran provisión de canela y casia y una multitud de otras especias, que eran mezcladas y quemadas diariamente como incienso para Dios. Entregó muchos otros tesoros, con una abundancia de ornamentos sagrados". .. Josephus, The Jewish War, vi.viii.3. Chilton.  Dias de Retribucion.

Nota: Edershenim - Describe el intenso comercio en Jerusalén:
"En estas calles y veredas, se podía comprar de todo: la producción de Palestina, o la importada de tierras extranjeras - más aún, los artículos más raros de las partes más remotas. Copas y anillos, exquisitamente formados, curiosamente diseñados, y cubiertos de joyas, así como otras artesanías de metales preciosos; vidrio, sedas, lino fino, artículos de lana, púrpura, y costosas colgaduras; esencias, ungüentos, y perfumes, tan preciosos como el oro; artículos de comer y beber de tierras extranjeras - resumiendo, lo que producían la India, Persia, Arabia, Media, Egipto, Italia, Grecia, y hasta las lejanas tierras de los gentiles podía obtenerse en estos bazares. Los antiguos escritos judíos nos permiten identificar no menos de 118 diferentes artículos importados del extranjero, y que cubrían aún más de lo que ha inventado el lujo moderno". Edersheim, The Life and Times of Jesus the Messiah, (p. 116).

Nota: Chilton - La lista de artículos de comercio de Juan se divide en varias secciones, generalmente de cuatro artículos cada una; la prosaica y práctica enumeración concluye con una sorpresa:
1) oro, plata, piedras preciosas, y perlas;
2) lino fino, púrpura, seda, y escarlata; 
3) toda madera olorosa, todo objeto de marfil, todo objeto de madera preciosa, cobre, hierro, y mármol;
4) canela, especies aromáticas, incienso, mirra, olíbano;
5) vino, aceite, flor de harina, trigo;
6) bestias, ovejas, caballos y carros, esclavos,
7) almas de hombres.
La frase final, adaptada de la descripción del tráfico de esclavos en Ezequiel 27:13, se aplica a la esclavitud espiritual de las almas de los hombres. Chilton. (p. 456). Dias de Retribucion.

Ap. 18.14-17 (RVR95) 14 Los frutos codiciados por tu alma se apartaron de ti, y todas las cosas exquisitas y espléndidas te han faltado y nunca más las hallarás. 15 Los mercaderes de estas cosas, que se han enriquecido a costa de ella, se pondrán lejos por el temor de su tormento, llorando y lamentando, 16 diciendo: «¡Ay, ay de la gran ciudad, que estaba vestida de lino fino, púrpura y escarlata, y estaba adornada de oro, piedras preciosas y perlas!, 17a porque en una sola hora han sido consumidas tantas riquezas».
Ap. 18.14-17 b (DHH) 14 Y dirán a la ciudad: “¡Ya no tienes las ricas frutas que tanto te gustaban; para siempre has perdido todos tus lujos y riquezas!” 15 Los que negociaban con esas cosas y se hicieron ricos a costa de la ciudad, se quedarán lejos por miedo a su castigo, llorando y lamentándose, 16 y dirán: “¡Ay, ay de la gran ciudad! Vestida de lino fino, con ropas de color púrpura y rojo, adornada con oro, perlas y piedras preciosas. 17a ¡Y en un instante se ha acabado tanta riqueza!”

Nota: Chilton - Jerusalén traficaba en muchas mercaderías, que venían desde todas partes del mundo.
·         A tono con las promesas de Levítico 26 y Deuteronomio 28, Dios la había hecho un gran centro comercial.
·         Pero ella abusó de los dones de Dios: Su comercio más básico era en almas humanas.
·         En vez de cumplir su función propia como la madre de toda la humanidad, se prostituyó, y condujo a sus hijos a la esclavitud demoníaca, a la opresión estatista, y finalmente a la aniquilación. Chilton. (p.456). Dias de Retribucion.

Nota: Chilton - Brevemente, la narración se vuelve para dirigirse a Jerusalén misma: Los frutos codiciados por tu alma se apartaron de tí, y todas las cosas exquisitas y espléndidas te han faltado, y nunca más las hallarás.
·         Prestando oídos a la Serpiente y buscando ser como Dios, la Esposa apostató, y así perdió acceso al fruto que ella deseaba [comp. Mat. 21:19, 43]; separada del árbol de la vida, perdió también las otras bendiciones del jardín, "todas las cosas exquisitas y espléndidas". Chilton. (p. 457). Dias de Retribucion.

Nota: Chilton - Los mercaderes de Israel se habían enriquecido, espiritual y (por lo tanto) materialmente, a causa de su relación con Jerusalén; ahora, a la vista de su destrucción, son incapaces de hacer nada, excepto llorar y lamentarse por “la gran ciudad, la que se vestía de lino fino y púrpura y escarlata, y se adornaba de oro y piedras preciosas y perlas.”
·         Nuevamente, la descripción de la ciudad-ramera indica su identidad como la Jerusalén apóstata, ataviada con la gloria del Templo y vestida en el lino fino de la Esposa justa (19:8).
·         Los que se han aprovechado de las riquezas de Jerusalén se sorprenden de lo súbito de su destrucción: ¡porque en una hora esta gran riqueza ha sido desolada!
·         Como ya a estas alturas deberíamos esperar, la expresión traducida como “desolada” es la prometida “desolación de Jerusalén” (Mat. 23:38; 24:15, etc.) la que se describe.

·         El término "hora" no debe tomarse en un sentido literal aquí, más que en otros usos metafóricos de la palabra; más bien, es usada a menudo, especialmente en Juan, para referirse a un momento crítico en particular (comp. Mat. 25:13; Mar. 14:41; Juan 2:4; 5:25, 28; 7:30; 8:20; 12:23; 17:1; 1 Juan 2:18).
·         Hay, sin embargo, el sentido de rapidez.
·         La destrucción de Jerusalén fue súbita, y hasta inesperada: hasta el mismo fin, el pueblo esperaba una liberación milagrosa.
·         El mundo del judaísmo apóstata quedó perplejo ante la desolación de la ciudad y del templo.
·         La caída de Jerusalén fue una sacudida para el sistema, de la cual nunca se ha recuperado. Chilton. (p. 456.). Dias de Retribucion.

Ap. 18:17-19 (RVR95) 17 Todo piloto y todos los que viajan en naves, los marineros y todos los que trabajan en el mar, se pusieron lejos, 18 y viendo el humo de su incendio dieron voces, diciendo: «¿Qué ciudad era semejante a esta gran ciudad?». 19 Y echaron polvo sobre sus cabezas y dieron voces, llorando y lamentando, diciendo: «¡Ay, ay de la gran ciudad, en la cual todos los que tenían naves en el mar se habían enriquecido de sus riquezas! ¡En una sola hora ha sido desolada!
Ap. 18.17-19 (DHH) 17 Todos los capitanes de barco y los que navegan por la costa, los marineros y todos los que se ganan la vida en el mar, se quedaron lejos 18 y, al ver el humo del incendio de la ciudad, gritaron: “¿Qué otra ciudad podía compararse a esta gran ciudad?” 19 Y se echaron polvo en la cabeza, llorando y lamentándose, y gritaron: “¡Ay, ay de la gran ciudad! Con su riqueza se hicieron ricos todos los que tenían barcos en el mar. ¡Y en un instante ha quedado destruida!”

Nota: Chilton - El tercer grupo que se lamenta por la ciudad caída está compuesto por todo piloto, y todos los que viajan en naves, y marineros, y todos los que trabajan en el mar.
·         Ellos también lamentan la pérdida de Jerusalén, porque todos los que tenían barcos en el mar se enriquecieron con la riqueza de ella.
·         Obviamente, la inversión en la economía de Israel cesó de ser lucrativa después del año 70 d. C., pero parece probable que el lamento de los "marineros" apunte a las naciones del mundo (de las cuales los marinos serían representantes, en todo caso). Chilton (p. 457). Dias de Retribucion.

Nota: Chilton - Ya Juan ha hablado del mar en relación con la gran ciudad: las aguas, sobre las cuales la ramera se sienta a horcajadas en la bestia, "son pueblos, muchedumbres, naciones y lenguas" (Ap. 17:15).
·         Juan ha enumerado también tres clases de personas afectadas por la destrucción de la ramera: "los reyes de la tierra", "los mercaderes de la tierra", y "todos los que tenían naves en el mar".
·         Estos parecen corresponder a la triple designación de los que habían sido corrompidos por la ramera, según el versículo 3: todas las naciones ... los reyes de la tierra ... los mercaderes de la tierra.
·         "Los que viajan en naves, los que trabajan en el mar" debieron haber sido instruídos en los caminos del Señor, para que pudiesen invocarle en su angustia, para que Él pudiese mostrarles la misericordia de su pacto (Sal. 107:23-32).
·         Y en realidad, cuando Israel andaba en la dignidad de su llamado, el mundo entero se enriqueció con su riqueza: había sido "guía de los ciegos, luz de los que están en tinieblas, instructor de los indoctos, maestro de niños, que tiene en la ley la forma de la ciencia y la verdad" (Rom. 2:19-20).

·         Cuando Israel estaba en comunión con Dios, y bajo su bendición espiritual y material, las naciones habían venido a él en busca tanto de sabiduría como de comercio (Deut. 28:12; 1 Reyes 10:23-25).
·         Sin embargo, en apostasía el comercio se convirtió en trampa, un medio de fornicar con idólatras, e Israel corrompió, no sólo a sus propios hijos, sino también a las naciones del mundo.
·         Israel se había arrogado los honores de la deidad, de manera que los marineros exclamaron: ¿Quién como la Gran Ciudad? (comp. la exclamación de los adoradores en Ap. 13:4: "¿Quién como la bestia?").
·         Pero, porque ella había dicho en su corazón: "Subiré al cielo.... Seré semejante al Altísimo", Jerusalén fue lanzada al infierno (Is. 14:13-15).
·         En una hora fue desolada, para no volver a ser la Gran Ciudad nunca más. Chilton. (p. 458). Dias de Retribucion.

Ap. 18.20 (RVR95) Alégrate sobre ella, cielo, y vosotros santos, apóstoles y profetas, porque Dios os ha hecho justicia en ella».
Ap. 18.20 (DHH) Tú, oh cielo, alégrate por causa de esa ciudad; y alégrense ustedes, los del pueblo santo, y los apóstoles y los profetas, porque Dios, al condenarla, les ha hecho justicia a ustedes.

Nota: TerryAp. 18:20
·         Alégrate sobre ella, el cielo: este repentino llamado al cielo, los santos, los apóstoles y los profetas a exultarse por la caída de Babilonia contrasta notablemente con el llanto y el lamento de los asociados terrenales de la ramera en ruinas. Comp. Is. 44:23; 49:13 y Jer. 51:48.
·         Esta exultación, como los aleluyas de Ap. 19:1–7, es la expresión de alegría sobre el triunfo de la justicia, y el juicio celebrado es aquello por lo que los mártires oraron (Ap. 6:10). Terry (1898). Apocalípticos bíblicos: un estudio (págs. 438–439).

Nota: Chilton - Ap. 18:20 Hay una cuarta respuesta a la caída de Jerusalén: la de la Iglesia.
·         El pueblo de Dios es instruido por el ángel para que se regocije por ello.
·          La Iglesia que moraba en el cielo como en un tabernáculo - santos y apóstoles y profetas - había orado pidiendo la destrucción de la ciudad apóstata y demonizada que condujo al mundo en rebelión contra Dios y a la persecución de sus hijos.

·         Al ascender al cielo el humo del holocausto entero, los santos han de regocijarse de que sus oraciones han sido contestadas: ¡Dios os ha hecho justicia en ella!, anuncia el ángel, empleando un pleonasmo hebraico para expresar el "doble testimonio" del divino tribunal contra ella.

·         Nuevamente encontramos que la imagen bíblica de la Iglesia, que tiene su morada en el cielo, está firme en su oposición al mal, orando a Dios para que vindique a su pueblo en la tierra.

·         Nótese bien: el juicio sobre la ramera es llamado el juicio tuyo, el juicio de la Iglesia.

·         Era la justa retribución de Israel por su opresión de los santos, los apóstoles, y los profetas a través de la historia, y que culminó en los últimos días en su guerra contra Cristo y su Iglesia.

·         Era ella la que había inspirado la persecución de los cristianos por parte de los romanos; pero, en su lugar, la ira de los paganos, que ella había atizado, había sido derramada sobre su cabeza.

·         Si la Iglesia de nuestro tiempo ha de proceder de victoria en victoria, como lo hizo la Iglesia en la era apostólica, debe recuperar la perspectiva triunfalista de los primeros santos.



·         La Iglesia debe orar por la derrota de sus enemigos - una derrota que debe ocurrir bien por conversión o por destrucción.

·         Estamos en guerra, una guerra en la cual la victoria definitiva ha sido obtenida por nuestro Rey.

·         Toda la historia es ahora una operación de limpieza en términos de esa victoria, esperando la conversión del mundo y la derrota de la misma muerte.

·         Nuestra oposición está condenada a perecer, y la Iglesia está llamada a regocijarse en el conocimiento cierto de su vindicación terrenal y su triunfo final. Chilton. (p. 459). Dias de Retribucion.

Ap. 18.21 (RVR95) Un ángel poderoso tomó una piedra, como una gran piedra de molino, y la arrojó en el mar, diciendo: «Con el mismo ímpetu será derribada Babilonia, la gran ciudad, y nunca más será hallada.
Ap. 18.21 (DHH) Entonces un ángel poderoso levantó una piedra, que era como una gran piedra de molino, y lanzándola al mar dijo: “Así serás tú echada abajo, Babilonia, la gran ciudad, y nunca más te volverán a ver.


Nota: Chilton - Ap. 18:21
Jesús había dado instrucciones a sus discípulos a que oraran para que la montaña de Jerusalén fuera lanzada al mar (Mat. 21:21);
·         Él había advertido a los fariseos que al que se opusiera al evangelio e impidiera que los "pequeñitos" lo recibieran más le valdría "que se colgara al cuello una piedra de molino y fuera echado al mar" (Lucas 17:2; comp. Mat. 18:6; Marcos 9:42).

·         Aquí, en lenguaje similar, la destrucción de Jerusalén es representada simbólicamente por la dramática acción de un ángel fuerte, la tercera y final ocurrencia de esta expresión en Apocalipsis.

·         En la primera (Ap. 5:2), se le oye llamar a alguien para que “abra el libro” declarando los juicios del pacto de Dios contra Jerusalén;

·         En la segunda (Ap. 10:1 ss.), se lo ve como testigo de la nueva creación, sosteniendo el "librito" que hablaba del Nuevo Pacto y del papel de la Iglesia en la historia de la redención, en la "consumación" del "misterio de Dios" en los últimos días.

·         Una expresión relacionada se usa en Ap. 18:1-2, donde un ángel de "voz potente" anuncia la condena final de Babilonia.

·         Ahora, en cumplimiento de todo esto, el ángel poderoso arroja en el mar una gran piedra.

·         Toda la productividad (la piedra de molino) desaparece (comp. .Ap. 18:23); en contraste con la Iglesia (1 Cor. 15:58), los trabajos de Jerusalén han sido en vano.

·         Ella y sus obras son lanzadas al abismo. Chilton. (p. 460). Dias de Retribucion.


Nota: Chilton - El símbolo se basa en el drama profético representado por Seraías, el mensajero de juicio de Jeremías (Jer. 51:61-64).
·         Después de leer la profecía de la "perpetua desolación" de Babilonia, ató el libro a una piedra y lo echó en el Eufrates, declarando: "Así se hundirá Babilonia, y no se levantará del mal que yo traigo sobre ella...".
·         Aplicando las palabras de Seraías a la ramera, el ángel dice: Con el mismo ímpetu será derribada Babilonia, la gran ciudad, y nunca más será hallada.
·         ¿Cómo se cumplió esto en el año 70 d. C. si "Jerusalén" está todavía en pie en el siglo veinte?
·         Por supuesto, en un sentido físico, Jerusalén no fue destruída “para siempre” en el año 70 d. C., no más de lo que Babilonia o Edom o Egipto fueron destruídos "para siempre".
·         Pero la profecía está orientada pactal y éticamente; no se ocupa principalmente de la geografía como tal.  Chilton. (p 461). Dias de Retribucion.


Nota: Chilton - De manera similar, la desolación de Jerusalén "para siempre" significa que Israel, como el pueblo del pacto, dejará de existir!
·         Jerusalén - como la Gran Ciudad, la Santa Ciudad - no se hallará más.
·         Es cierto que, como muestra Romanos claramente, los descendientes de Abraham serán injertados en el pacto nuevamente.
·         Pero ellos no serán una nación distinta, santa, de sacerdotes especiales.
·         Se unirán a los pueblos del mundo en la multitud de los salvados, sin ninguna distinción (Is.19:19-25).
·         Por medio de su obra consumada, Cristo "de ambos pueblos [creyentes hebreos y gentiles] hizo uno" (Ef. 2:14).
·         Han sido unidos "en un solo cuerpo", la Iglesia (Ef. 2:16).
·         Hay una salvación y una Iglesia, en la cual todos los creyentes, sin importar su herencia étnica, vienen a ser hijos de Dios y herederos de las promesas hechas a Abraham (Gal. 3:26-29; comp. Ef. 2:11-22).
·         La antigua Jerusalén, la ramera apóstata, ha sido reemplazada por la nueva Jerusalén, la Esposa pura de Cristo. No hay salvación fuera de la Iglesia. Chilton. (p.463). Dias de Retribucion.

Ap. 18.22-23 (RVR95) Voz de arpistas, músicos, flautistas y trompetistas no se oirá más de ti. Ni se hallará más en ti artífice de oficio alguno, ni ruido de molinos se oirá más en ti. 23 Luz de lámpara no alumbrará más en ti, ni voz de esposo y esposa se oirá más en ti, porque tus mercaderes eran los grandes de la tierra y por tus hechicerías fueron engañadas todas las naciones.
Ap. 18.22-23 (DHH) Nunca más se oirá en tus calles música de arpas, flautas y trompetas, ni habrá en ti trabajadores de ningún oficio, ni se oirá en ti el ruido de la piedra del molino. 23 Nunca más brillará en ti la luz de una lámpara, ni se oirá en ti el bullicio de las fiestas de bodas. Porque tus comerciantes eran los poderosos del mundo y engañaste a todas las naciones con tus brujerías.”

Nota: Chilton - Ap. 18:22-23 Como una indicación adicional de que la posición pactal de la ramera ha sido eliminada, el ángel anuncia que las bendiciones del jardín de Edén serán quitadas para siempre.
·         Aludiendo tanto a las profecías de Jeremías contra la rebelde Jerusalén de su tiempo (Jer. 7:34; 16:9; 25:10; comp. Is. 24:7-12), como a la profecía de Ezequiel contra el rey de Tiro (Eze. 28:11-19), el ángel pronuncia la suerte de la ciudad en cinco partes:

    Primera, hay una descripción cuádruple de la pérdida de la música por toda la tierra: Y voz de arpistas, de músicos, de flautistas y de trompeteros no se oirá más en tí (comp. la mención de "tamboriles" y "flautas" en Ez. 28:13).
   
    Segunda, la productividad de la tierra desaparece, pues el trabajador será tomado de Israel y echado en el abismo: Ningún artífice de oficio alguno se hallará más en tí. Según Zacarías, la tiranía de las naciones paganas sobre Israel sería restringida por sus artífices (Zac. 1:18-21). Pero, para el Israel apóstata, este baluarte contra la opresión ya no existirá más.
   
    El tercero es significativo: Ni ruido de molino se oirá más en ti. A través del mundo antiguo, la imagen del molino era símbolo de la fundación del cosmos, que al funcionar producía paz y prosperidad; la destrucción del molino significa el fin de la era. La centralidad del molino en este pasaje puede indicar que el templo, como el molino que sostiene el mundo, ha de ser destruído; Cristo ha introducido la era final.
   
    Cuarta, Israel sufrirá la pérdida de la palabra de Dios, del discernimiento y la sabiduría, y de la esperanza escatológica: Luz de lámpara no alumbrará más en ti.
   
    Quinta, el resumen de la desolación de Israel es que, como la esposa infiel, la ramera, ha sido echada fuera y reemplazada por otra: Voz de Esposo y de Esposa no se oirá más en ti. Chilton. (p. 464). Dias de Retribucion.

Nota: Chilton: Se dice que la desolación de Jerusalén cayó sobre ella por dos razones!
o   Primera, sus mercaderes eran los grandes de la tierra.
§  Esto no debería parecer extraño a primera vista; algo muy parecido podría decirse de cualquier ciudad en la historia.
§  En cualquier economía próspera, los mercaderes serán prominentes.

§  Pero, en fin de cuentas, ¿en qué comerciaban los mercaderes? Almas de hombres (v. 13).


§  Como Jesús había tronado a los "grandes de la tierra":Ay de vosotros, escribas y fariseos, hipócritas! porque recorréis mar y tierra para hacer un prosélito, y una vez hecho, le hacéis dos veces más hijo del infierno que vosotros" (Mat. 23:15).

o   La segunda razón para el castigo de Jerusalén emana de la primera: Todas las naciones fueron engañadas por vuestra hechicería.

§  Israel había sido sacerdote para las naciones del mundo, ordenado tanto para traerles la luz de la salvación como para ofrecer sacrificios a favor de ellos.
§  Esto debería haber culminado con la presentación de Cristo a las naciones como la luz del mundo y el verdadero sacrificio por sus pecados.

§  En vez de eso, Israel rechazó a Cristo, la suma y la substancia de la religión bíblica.
§  Al intentar retener la estructura formal del Antiguo Pacto en su rechazo del Nuevo, Israel creó en esencia una religión híbrida de oculto satanismo y estatismo. Y fue hecho trizas por sus propios dioses. Chilton. (p. 465). Dias de Retribucion.

Ap. 18.24 (RVR95) En ella se halló la sangre de los profetas y de los santos y de todos los que han sido muertos en la tierra».
Ap. 18.24 (DHH) Pues en esa ciudad se ha encontrado la sangre de los profetas y del pueblo santo, y de todos los que han sido asesinados en el mundo.


Nota: Chilton - Ap. 18:24 En este versículo, Juan proporciona una pista final de la identidad de la ramera, confirmando nuestra interpretación de que ella representa a Jerusalén: En ella se encontró la sangre de los profetas y de los santos y de todos los que han sido muertos en la tierra.
·         Esta es una clara alusión de Cristo a la condena de Jerusalén, al final de su discurso en el Templo:
Por tanto, he aquí que yo os envío profetas y sabios y escribas; y de ellos, a unos mataréis y crucificaréis, y a otros azotaréis en vuestras sinagogas, y perseguiréis de ciudad en ciudad; para que venga sobre vosotros toda la sangre justa que se ha derramado sobre la tierra, desde la sangre de Abel el justo hasta la sangre de Zacarías hijo de Berequías, a quien matásteis entre el templo y el altar. De cierto os digo que todo esto vendrá sobre esta generación. ¡Jerusalén, Jerusalén, que matas a los profetas, y apedreas a los que te son enviados! (Mat. 23:34-37).

·         Este lenguaje no puede ser usado para hablar de Roma ni de ninguna otra ciudad. Sólo Jerusalén era culpable de "toda la sangre justa que se ha derramado sobre la tierra", desde Abel en adelante.

·         Históricamente, fue Jerusalén la que siempre había sido la gran ramera, apostatando constantemente y persiguiendo a los profetas (Hechos 7:51-52); Jerusalén fue el lugar donde los profetas fueron muertos: como dijo Jesús mismo: "No es posible que un profeta muera fuera de Jerusalén. ¡Jerusalén, Jerusalén, que matas a los profetas y apedreas a los que te son enviados! (Lucas 13:33-34).
·         La "Demanda de Pacto" de Juan era verdadera y efectiva. Jerusalén fue encontrada culpable de todos los cargos, y desde el año 66 hasta el año 70 d. C., sufrió los "días de retribución", el derramamiento de la ira de Dios por haber derramado sangre inocente durante siglos. Chilton. (p. 466). Dias de Retribucion.



Fin de Estudio: Ap. 18:1-24 - Ha Caído Babilonia (Jerusalem) 

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